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viernes, 24 de agosto de 2012

Promesas biblicas (Isaías)

  • Is. 1:18-19 - Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana. Si quisiereis y oyereis, comeréis el bien de la tierra. - Promesa de Salvación y de Perdón.
  • Is. 2:2-4 – Acontecerá en lo postrero de los tiempos, que será confirmado el monte de la casa de Jehová como cabeza de los montes, y será exaltado sobre los collados, y correrán a él todas las naciones. Y vendrán muchos pueblos, y dirán: Venid, y subamos al monte de Jehová, a la casa del Dios de Jacob; y nos enseñará sus caminos, y caminaremos por sus sendas. Porque de Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová. Y juzgará entre las naciones, y reprenderá a muchos pueblos; y volverán sus espadas en rejas de arado, y sus lanzas en hoces; no alzará espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra.
  • Is. 6:3 – Y el uno al otro daba voces, diciendo: Santo, santo, santo, Jehová de los ejércitos; toda la tierra está llena de su gloria.
  • Is. 6:5 – Entonces dije: ¡Ay de mí! que soy muerto; porque siendo hombre inmundo de labios, y habitando en medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos.
  • Is. 7:14 – Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emanuel. - Promesa de un Mesías.
  • Is. 9:6-7 – Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre. El celo de Jehová de los ejércitos hará esto. - Promesa de un Mesías, de un Reino Mesianico y de Paz.
  • Is. 11:1-2 – Saldrá una vara del tronco de Isaí, y un vástago retoñará de sus raíces. Y reposará sobre él el Espíritu de Jehová; espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de poder, espíritu de conocimiento y de temor de Jehová. - Promesa de un Mesías.
  • Is. 11:4 – Sino que juzgará con justicia a los pobres, y argüirá con equidad por los mansos de la tierra; y herirá la tierra con la vara de su boca, y con el espíritu de sus labios matará al impío. - Promesa de Protección.
  • Is. 11:6-9 – Morará el lobo con el cordero, y el leopardo con el cabrito se acostará; el becerro y el león y la bestia doméstica andarán juntos, y un niño los pastoreará. La vaca y la osa pacerán, sus crías se echarán juntas; y el león como el buey comerá paja. Y el niño de pecho jugará sobre la cueva del áspid, y el recién destetado extenderá su mano sobre la caverna de la víbora. No harán mal ni dañarán en todo mi santo monte; porque la tierra será llena del conocimiento de Jehová, como las aguas cubren el mar. - Promesa de un Reino Mesianico.
  • Is. 11:12 – Y levantará pendón a las naciones, y juntará los desterrados de Israel, y reunirá los esparcidos de Judá de los cuatro confines de la tierra.
  • Is. 12:1-3 – En aquel día dirás: Cantaré a ti, oh Jehová; pues aunque te enojaste contra mí, tu indignación se apartó, y me has consolado. 2 He aquí Dios es salvación mía; me aseguraré y no temeré; porque mi fortaleza y mi canción es JAH Jehová, quien ha sido salvación para mí. Sacaréis con gozo aguas de las fuentes de la salvación. - Promesa de Consuelo y Gozo.
  • Is. 12:5-6 – Cantad salmos a Jehová, porque ha hecho cosas magníficas; sea sabido esto por toda la tierra. Regocíjate y canta, oh moradora de Sion; porque grande es en medio de ti el Santo de Israel. - Promesa de Gozo.
  • Is. 14:30 – Y los primogénitos de los pobres serán apacentados, y los menesterosos se acostarán confiados; mas yo haré morir de hambre tu raíz, y destruiré lo que de ti quedare. - Promesa de Protección.
  • Is. 19:23-25 – En aquel tiempo habrá una calzada de Egipto a Asiria, y asirios entrarán en Egipto, y egipcios en Asiria; y los egipcios servirán con los asirios a Jehová. En aquel tiempo Israel será tercero con Egipto y con Asiria para bendición en medio de la tierra; porque Jehová de los ejércitos los bendecirá diciendo: Bendito el pueblo mío Egipto, y el asirio obra de mis manos, e Israel mi heredad.
  • Is. 25:4 – Porque fuiste fortaleza al pobre, fortaleza al menesteroso en su aflicción, refugio contra el turbión, sombra contra el calor; porque el ímpetu de los violentos es como turbión contra el muro. - Promesa de Consuelo y Protección.
  • Is. 25:8-9 - Destruirá a la muerte para siempre; y enjugará Jehová el Señor toda lágrima de todos los rostros; y quitará la afrenta de su pueblo de toda la tierra; porque Jehová lo ha dicho. Y se dirá en aquel día: He aquí, éste es nuestro Dios, le hemos esperado, y nos salvará; éste es Jehová a quien hemos esperado, nos gozaremos y nos alegraremos en su salvación. - Promesa de Consuelo y de Resurección.
  • Is. 26:3-4 – Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado. Confiad en Jehová perpetuamente, porque en Jehová el Señor está la fortaleza de los siglos. - Promesa de Fortaleza, de Paz y Confianza.
  • Is. 26:9 – Con mi alma te he deseado en la noche, y en tanto que me dure el espíritu dentro de mí, madrugaré a buscarte; porque luego que hay juicios tuyos en la tierra, los moradores del mundo aprenden justicia. - Promesa de Disciplina.
  • Is. 26:12 – Jehová, tú nos darás paz, porque también hiciste en nosotros todas nuestras obras. - Promesa de Paz.
  • Is. 26:16 – Jehová, en la tribulación te buscaron; derramaron oración cuando los castigaste. - Promesa de Disciplina.
  • Is. 26:19 – Tus muertos vivirán; sus cadáveres resucitarán. ¡Despertad y cantad, moradores del polvo! porque tu rocío es cual rocío de hortalizas, y la tierra dará sus muertos. - Promesa de Resurección.
  • Is. 27:3 – Jehová la guardo, cada momento la regaré; la guardaré de noche y de día, para que nadie la dañe.
  • Is. 28:16 – Por tanto, Jehová el Señor dice así: He aquí que yo he puesto en Sion por fundamento una piedra, piedra probada, angular, preciosa, de cimiento estable; el que creyere, no se apresure.
  • Is. 28:26 – Porque su Dios le instruye, y le enseña lo recto.
  • Is. 29:11-13 – Y os será toda visión como palabras de libro sellado, el cual si dieren al que sabe leer, y le dijeren: Lee ahora esto; él dirá: No puedo, porque está sellado. Y si se diere el libro al que no sabe leer, diciéndole: Lee ahora esto; él dirá: No sé leer. Dice, pues, el Señor: Porque este pueblo se acerca a mí con su boca, y con sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mí, y su temor de mí no es más que un mandamiento de hombres que les ha sido enseñado.
  • Is. 29:19 – Entonces los humildes crecerán en alegría en Jehová, y aun los más pobres de los hombres se gozarán en el Santo de Israel. - Promesa de Protección.
  • Is. 30:15 – Porque así dijo Jehová el Señor, el Santo de Israel: En descanso y en reposo seréis salvos; en quietud y en confianza será vuestra fortaleza. Y no quisisteis. - Promesa de Descanso y de Confianza.
  • Is. 30:18 – Por tanto, Jehová esperará para tener piedad de vosotros, y por tanto, será exaltado teniendo de vosotros misericordia; porque Jehová es Dios justo; bienaventurados todos los que confían en él. - Promesa de Misericordia.
  • Is. 30:20-21 – Bien que os dará el Señor pan de congoja y agua de angustia, con todo, tus maestros nunca más te serán quitados, sino que tus ojos verán a tus maestros. Entonces tus oídos oirán a tus espaldas palabra que diga: Este es el camino, andad por él; y no echéis a la mano derecha, ni tampoco torzáis a la mano izquierda. - Promesa de Dirección y a los Maestros.
  • Is. 30:29 – Vosotros tendréis cántico como de noche en que se celebra pascua, y alegría de corazón, como el que va con flauta para venir al monte de Jehová, al Fuerte de Israel. - Promesa de Liberación.
  • Is. 31:4-5 – Porque Jehová me dijo a mí de esta manera: Como el león y el cachorro de león ruge sobre la presa, y si se reúne cuadrilla de pastores contra él, no lo espantarán sus voces, ni se acobardará por el tropel de ellos; así Jehová de los ejércitos descenderá a pelear sobre el monte de Sion, y sobre su collado. Como las aves que vuelan, así amparará Jehová de los ejércitos a Jerusalén, amparando, librando, preservando y salvando.
  • Is. 32:1-2 - He aquí que para justicia reinará un rey, y príncipes presidirán en juicio. Y será aquel varón como escondedero contra el viento, y como refugio contra el turbión; como arroyos de aguas en tierra de sequedad, como sombra de gran peñasco en tierra calurosa. - Promesa de un Reino Mesianico.
  • Is. 32:17-20 – Y el efecto de la justicia será paz; y la labor de la justicia, reposo y seguridad para siempre. Y mi pueblo habitará en morada de paz, en habitaciones seguras, y en recreos de reposo. Y cuando caiga granizo, caerá en los montes; y la ciudad será del todo abatida. Dichosos vosotros los que sembráis junto a todas las aguas, y dejáis libres al buey y al asno.
  • Is. 33:2 - Oh Jehová, ten misericordia de nosotros, a ti hemos esperado; tú, brazo de ellos en la mañana, sé también nuestra salvación en tiempo de la tribulación.
  • Is. 33:6 – Y reinarán en tus tiempos la sabiduría y la ciencia, y abundancia de salvación; el temor de Jehová será su tesoro. - Promesa de un Reino Mesianico y de Salvación.
  • Is. 33:17 – Tus ojos verán al Rey en su hermosura; verán la tierra que está lejos. - Promesa de un Reino Mesianico.
  • Is. 33:22-24 – Porque Jehová es nuestro juez, Jehová es nuestro legislador, Jehová es nuestro Rey; él mismo nos salvará. Tus cuerdas se aflojaron; no afirmaron su mástil, ni entesaron la vela; se repartirá entonces botín de muchos despojos; los cojos arrebatarán el botín. No dirá el morador: Estoy enfermo; al pueblo que more en ella le será perdonada la iniquidad.
  • Is. 35:4-10 – Decid a los de corazón apocado: Esforzaos, no temáis; he aquí que vuestro Dios viene con retribución, con pago; Dios mismo vendrá, y os salvará. Entonces los ojos de los ciegos serán abiertos, y los oídos de los sordos se abrirán. Entonces el cojo saltará como un ciervo, y cantará la lengua del mudo; porque aguas serán cavadas en el desierto, y torrentes en la soledad. El lugar seco se convertirá en estanque, y el sequedal en manaderos de aguas; en la morada de chacales, en su guarida, será lugar de cañas y juncos. Y habrá allí calzada y camino, y será llamado Camino de Santidad; no pasará inmundo por él, sino que él mismo estará con ellos; el que anduviere en este camino, por torpe que sea, no se extraviará. No habrá allí león, ni fiera subirá por él, ni allí se hallará, para que caminen los redimidos. Y los redimidos de Jehová volverán, y vendrán a Sion con alegría; y gozo perpetuo será sobre sus cabezas; y tendrán gozo y alegría, y huirán la tristeza y el gemido. - Promesa de Consuelo.
  • Is. 38:17 – He aquí, amargura grande me sobrevino en la paz, mas a ti agradó librar mi vida del hoyo de corrupción; porque echaste tras tus espaldas todos mis pecados. - Promesa de Protección.
  • Is. 40:1-5 – Consolaos, consolaos, pueblo mío, dice vuestro Dios. Hablad al corazón de Jerusalén; decidle a voces que su tiempo es ya cumplido, que su pecado es perdonado; que doble ha recibido de la mano de Jehová por todos sus pecados. Voz que clama en el desierto: Preparad camino a Jehová; enderezad calzada en la soledad a nuestro Dios. Todo valle sea alzado, y bájese todo monte y collado; y lo torcido se enderece, y lo áspero se allane. Y se manifestará la gloria de Jehová, y toda carne juntamente la verá; porque la boca de Jehová ha hablado. - Promesa de la Gloria del Señor Jehová y de Consuelo.
  • Is. 40:8 – Sécase la hierba, marchítase la flor; mas la palabra del Dios nuestro permanece para siempre. - Promesa de la Palabra de Dios.
  • Is. 40:10 – He aquí que Jehová el Señor vendrá con poder, y su brazo señoreará; he aquí que su recompensa viene con él, y su paga delante de su rostro. - Promesa de Recompensa.
  • Is. 40:11 – Como pastor apacentará su rebaño; en su brazo llevará los corderos, y en su seno los llevará; pastoreará suavemente a las recién paridas. - Promesa de Misericordia y de Protección.
  • Is. 40:26 – Levantad en alto vuestros ojos, y mirad quién creó estas cosas; él saca y cuenta su ejército; a todas llama por sus nombres; ninguna faltará; tal es la grandeza de su fuerza, y el poder de su dominio.

  • Is. 40:29-31 – El da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas. Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen; pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán. - Promesa de Esperanza y de Fortaleza.
  • Is. 41:10-20 – No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia. He aquí que todos los que se enojan contra ti serán avergonzados y confundidos; serán como nada y perecerán los que contienden contigo. Buscarás a los que tienen contienda contigo, y no los hallarás; serán como nada, y como cosa que no es, aquellos que te hacen la guerra. Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo. No temas, gusano de Jacob, oh vosotros los pocos de Israel; yo soy tu socorro, dice Jehová; el Santo de Israel es tu Redentor. He aquí que yo te he puesto por trillo, trillo nuevo, lleno de dientes; trillarás montes y los molerás, y collados reducirás a tamo. Los aventarás, y los llevará el viento, y los esparcirá el torbellino; pero tú te regocijarás en Jehová, te gloriarás en el Santo de Israel. Los afligidos y menesterosos buscan las aguas, y no las hay; seca está de sed su lengua; yo Jehová los oiré, yo el Dios de Israel no los desampararé. En las alturas abriré ríos, y fuentes en medio de los valles; abriré en el desierto estanques de aguas, y manantiales de aguas en la tierra seca. Daré en el desierto cedros, acacias, arrayanes y olivos; pondré en la soledad cipreses, pinos y bojes juntamente, para que vean y conozcan, y adviertan y entiendan todos, que la mano de Jehová hace esto, y que el Santo de Israel lo creó. - Promesa de Ayuda, Victoria y Confianza.

  • Is. 42:1 - He aquí mi siervo, yo le sostendré; mi escogido, en quien mi alma tiene contentamiento; he puesto sobre él mi Espíritu; él traerá justicia a las naciones. - Promesa a las Misiones.
  • Is. 42:3 - Quebrará la caña cascada, ni apagará el pábilo que humeare; por medio de la verdad traerá justicia.
  • Is. 42:6-7 – Yo Jehová te he llamado en justicia, y te sostendré por la mano; te guardaré y te pondré por pacto al pueblo, por luz de las naciones, para que abras los ojos de los ciegos, para que saques de la cárcel a los presos, y de casas de prisión a los que moran en tinieblas. - Promesa a las Misiones y de la Presencia de Dios.
  • Is. 42:9 – He aquí se cumplieron las cosas primeras, y yo anuncio cosas nuevas; antes que salgan a luz, yo os las haré notorias.
  • Is. 42:16 – Y guiaré a los ciegos por camino que no sabían, les haré andar por sendas que no habían conocido; delante de ellos cambiaré las tinieblas en luz, y lo escabroso en llanura. Estas cosas les haré, y no los desampararé.

  • Is. 43:1-5 – Ahora, así dice Jehová, Creador tuyo, oh Jacob, y Formador tuyo, oh Israel: No temas, porque yo te redimí; te puse nombre, mío eres tú. Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti. Porque yo Jehová, Dios tuyo, el Santo de Israel, soy tu Salvador; a Egipto he dado por tu rescate, a Etiopía y a Seba por ti. Porque a mis ojos fuiste de gran estima, fuiste honorable, y yo te amé; daré, pues, hombres por ti, y naciones por tu vida. No temas, porque yo estoy contigo; del oriente traeré tu generación, y del occidente te recogeré. - Promesa de Aliento, de la Presencia de Dios, de Confianza, del Amor de Dios, de Aliento, de Defensa, a las Misiones y Ayuda.
  • Is. 43:19-21- He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la soledad. Las fieras del campo me honrarán, los chacales y los pollos del avestruz; porque daré aguas en el desierto, ríos en la soledad, para que beba mi pueblo, mi escogido. Este pueblo he creado para mí; mis alabanzas publicará. - Promesa de Protección.
  • Is. 43:25 – Yo, yo soy el que borro tus rebeliones por amor de mí mismo, y no me acordaré de tus pecados.
  • Is. 44:3 – Porque yo derramaré aguas sobre el sequedal, y ríos sobre la tierra árida; mi Espíritu derramaré sobre tu generación, y mi bendición sobre tus renuevos.
  • Is. 44:22 – Yo deshice como una nube tus rebeliones, y como niebla tus pecados; vuélvete a mí, porque yo te redimí. - Promesa de Perdón.
  • Is. 45:1 – Así dice Jehová a su ungido, a Ciro, al cual tomé yo por su mano derecha, para sujetar naciones delante de él y desatar lomos de reyes; para abrir delante de él puertas, y las puertas no se cerrarán. - Promesa a las Misiones.
  • Is. 45:6 – Para que se sepa desde el nacimiento del sol, y hasta donde se pone, que no hay más que yo; yo Jehová, y ninguno más que yo. - Promesa a las Misiones.
  • Is. 45:22 – A mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra, porque yo soy Dios, y no hay más. - Promesa de Salvación.
  • Is. 45:25 – En Jehová será justificada y se gloriará toda la descendencia de Israel.
  • Is. 46.4 – Y hasta la vejez yo mismo, y hasta las canas os soportaré yo; yo hice, yo llevaré, yo soportaré y guardaré. - Promesa en la Ancianidad.
  • Is. 46:11 – Que llamo desde el oriente al ave, y de tierra lejana al varón de mi consejo. Yo hablé, y lo haré venir; lo he pensado, y también lo haré.
  • Is. 46:13 – Haré que se acerque mi justicia; no se alejará, y mi salvación no se detendrá. Y pondré salvación en Sion, y mi gloria en Israel. - Promesa de Paz.
  • Is. 48:17-18 – Así ha dicho Jehová, Redentor tuyo, el Santo de Israel: Yo soy Jehová Dios tuyo, que te enseña provechosamente, que te encamina por el camino que debes seguir. ¡Oh, si hubieras atendido a mis mandamientos! Fuera entonces tu paz como un río, y tu justicia como las ondas del mar. - Promesa de Dirección y de Paz.

  • Is. 49:1 – Oídme, costas, y escuchad, pueblos lejanos. Jehová me llamó desde el vientre, desde las entrañas de mi madre tuvo mi nombre en memoria. - Promesas a las Misiones.
  • Is. 49:6 – Dice: Poco es para mí que tú seas mi siervo para levantar las tribus de Jacob, y para que restaures el remanente de Israel; también te di por luz de las naciones, para que seas mi salvación hasta lo postrero de la tierra. - Promesa a las Misiones.
  • Is. 49:8 – Así dijo Jehová: En tiempo aceptable te oí, y en el día de salvación te ayudé; y te guardaré, y te daré por pacto al pueblo, para que restaures la tierra, para que heredes asoladas heredades. - Promesa de Salvación.
  • Is. 49:10 – No tendrán hambre ni sed, ni el calor ni el sol los afligirá; porque el que tiene de ellos misericordia los guiará, y los conducirá a manantiales de aguas. - Promesa de Misericordia y Protección.
  • Is. 49:12-13 – He aquí éstos vendrán de lejos; y he aquí éstos del norte y del occidente, y éstos de la tierra de Sinim. Cantad alabanzas, oh cielos, y alégrate, tierra; y prorrumpid en alabanzas, oh montes; porque Jehová ha consolado a su pueblo, y de sus pobres tendrá misericordia.
  • Is. 49:15- ¿Se olvidará la mujer de lo que dio a luz, para dejar de compadecerse del hijo de su vientre? Aunque olvide ella, yo nunca me olvidaré de ti. - Promesa de Amor de Dios y Misericordia.

  • Is. 49:24-26 – ¿Será quitado el botín al valiente? ¿Será rescatado el cautivo de un tirano? Pero así dice Jehová: Ciertamente el cautivo será rescatado del valiente, y el botín será arrebatado al tirano; y tu pleito yo lo defenderé, y yo salvaré a tus hijos. Y a los que te despojaron haré comer sus propias carnes, y con su sangre serán embriagados como con vino; y conocerá todo hombre que yo Jehová soy Salvador tuyo y Redentor tuyo, el Fuerte de Jacob. - Promesa de Defensa.
  • Is. 50:4 – Jehová el Señor me dio lengua de sabios, para saber hablar palabras al cansado; despertará mañana tras mañana, despertará mi oído para que oiga como los sabios. - Promesa a las Misiones.
  • Is. 50:10 – ¿Quién hay entre vosotros que teme a Jehová, y oye la voz de su siervo? El que anda en tinieblas y carece de luz, confíe en el nombre de Jehová, y apóyese en su Dios. - Promesa de Dirección.
  • Is. 51:3 – Ciertamente consolará Jehová a Sion; consolará todas sus soledades, y cambiará su desierto en paraíso, y su soledad en huerto de Jehová; se hallará en ella alegría y gozo, alabanza y voces de canto.
  • Is. 51:5 – Cercana está mi justicia, ha salido mi salvación, y mis brazos juzgarán a los pueblos; a mí me esperan los de la costa, y en mi brazo ponen su esperanza. - Promesa a las Misiones.
  • Is. 51:7 – Oídme, los que conocéis justicia, pueblo en cuyo corazón está mi ley. No temáis afrenta de hombre, ni desmayéis por sus ultrajes.
  • Is. 51:11-12 – Ciertamente volverán los redimidos de Jehová; volverán a Sion cantando, y gozo perpetuo habrá sobre sus cabezas; tendrán gozo y alegría, y el dolor y el gemido huirán. Yo, yo soy vuestro consolador. ¿Quién eres tú para que tengas temor del hombre, que es mortal, y del hijo de hombre, que es como heno? - Promesa de Consuelo y Gozo.

  • Is. 51:15-16 – Porque yo Jehová, que agito el mar y hago rugir sus ondas, soy tu Dios, cuyo nombre es Jehová de los ejércitos. Y en tu boca he puesto mis palabras, y con la sombra de mi mano te cubrí, extendiendo los cielos y echando los cimientos de la tierra, y diciendo a Sion: Pueblo mío eres tú.
  • Is. 52:1 – Despierta, despierta, vístete de poder, oh Sion; vístete tu ropa hermosa, oh Jerusalén, ciudad santa; porque nunca más vendrá a ti incircunciso ni inmundo.
  • Is. 52:7 – ¡Cuán hermosos son sobre los montes los pies del que trae alegres nuevas, del que anuncia la paz, del que trae nuevas del bien, del que publica salvación, del que dice a Sion: ¡Tu Dios reina! - Promesa a las Misiones.
  • Is. 52:9 – Cantad alabanzas, alegraos juntamente, soledades de Jerusalén; porque Jehová ha consolado a su pueblo, a Jerusalén ha redimido. - Promesa de Consuelo.
  • Is. 53:4-6 – Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados. Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros. - Promesa de Sanidad, Perdón y Salvación.

  • Is. 53:11 – Verá el fruto de la aflicción de su alma, y quedará satisfecho; por su conocimiento justificará mi siervo justo a muchos, y llevará las iniquidades de ellos.
  • Is. 54:2-3 – Ensancha el sitio de tu tienda, y las cortinas de tus habitaciones sean extendidas; no seas escasa; alarga tus cuerdas, y refuerza tus estacas. Porque te extenderás a la mano derecha y a la mano izquierda; y tu descendencia heredará naciones, y habitará las ciudades asoladas. - Promesa a las Misiones.
  • Is. 54:5 – Tu marido es tu Hacedor; Jehová de los ejércitos es su nombre; y tu Redentor, el Santo de Israel; Dios de toda la tierra será llamado. 6Porque como a mujer abandonada y triste de espíritu te llamó Jehová, y como a la esposa de la juventud que es repudiada, dijo el Dios tuyo.
  • Is. 54:7-8 – Por un breve momento te abandoné, pero te recogeré con grandes misericordias. Con un poco de ira escondí mi rostro de ti por un momento; pero con misericordia eterna tendré compasión de ti, dijo Jehová tu Redentor.
  • Is. 54:10 – Porque los montes se moverán, y los collados temblarán, pero no se apartará de ti mi misericordia, ni el pacto de mi paz se quebrantará, dijo Jehová, el que tiene misericordia de ti. - Promesa de la Fidelidad de Dios y de Misericordia.

  • Is. 54:13-17 – Y todos tus hijos serán enseñados por Jehová; y se multiplicará la paz de tus hijos. Con justicia serás adornada; estarás lejos de opresión, porque no temerás, y de temor, porque no se acercará a ti. Si alguno conspirare contra ti, lo hará sin mí; el que contra ti conspirare, delante de ti caerá. He aquí que yo hice al herrero que sopla las ascuas en el fuego, y que saca la herramienta para su obra; y yo he creado al destruidor para destruir. Ninguna arma forjada contra ti prosperará, y condenarás toda lengua que se levante contra ti en juicio. Esta es la herencia de los siervos de Jehová, y su salvación de mí vendrá, dijo Jehová. - Promesa de Defensa y a los Padres.
  • Is. 55:4-7 – He aquí que yo lo di por testigo a los pueblos, por jefe y por maestro a las naciones. He aquí, llamarás a gente que no conociste, y gentes que no te conocieron correrán a ti, por causa de Jehová tu Dios, y del Santo de Israel que te ha honrado. Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano. Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar. - Promesa a los Maestros, de Misericordia, Perdón y de Misiones.
  • Is. 55:10-13 – Porque como desciende de los cielos la lluvia y la nieve, y no vuelve allá, sino que riega la tierra, y la hace germinar y producir, y da semilla al que siembra, y pan al que come, así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié. Porque con alegría saldréis, y con paz seréis vueltos; los montes y los collados levantarán canción delante de vosotros, y todos los árboles del campo darán palmadas de aplauso. En lugar de la zarza crecerá ciprés, y en lugar de la ortiga crecerá arrayán; y será a Jehová por nombre, por señal eterna que nunca será raída. - Promesa de Gozo y de Misiones.

  • Is. 56:7 – Los llevaré a mi santo monte, y los recrearé en mi casa de oración; sus holocaustos y sus sacrificios serán aceptos sobre mi altar; porque mi casa será llamada casa de oración para todos los pueblos.
  • Is. 57:1-2 – Perece el justo, y no hay quien piense en ello; y los piadosos mueren, y no hay quien entienda que de delante de la aflicción es quitado el justo. Entrará en la paz; descansarán en sus lechos todos los que andan delante de Dios. - Promesa de Luto.
  • Is. 57:15 – Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo: Yo habito en la altura y la santidad, y con el quebrantado y humilde de espíritu, para hacer vivir el espíritu de los humildes, y para vivificar el corazón de los quebrantados. - Promesa de Consuelo y de Protección.
  • Is. 57:18-19 – He visto sus caminos; pero le sanaré, y le pastorearé, y le daré consuelo a él y a sus enlutados; produciré fruto de labios: Paz, paz al que está lejos y al cercano, dijo Jehová; y lo sanaré. - Promesa de Protección, de Consuelo y de Luto.

  • Is. 58:8-11 – Entonces nacerá tu luz como el alba, y tu salvación se dejará ver pronto; e irá tu justicia delante de ti, y la gloria de Jehová será tu retaguardia. Entonces invocarás, y te oirá Jehová; clamarás, y dirá él: Heme aquí. Si quitares de en medio de ti el yugo, el dedo amenazador, y el hablar vanidad; y si dieres tu pan al hambriento, y saciares al alma afligida, en las tinieblas nacerá tu luz, y tu oscuridad será como el mediodía. Jehová te pastoreará siempre, y en las sequías saciará tu alma, y dará vigor a tus huesos; y serás como huerto de riego, y como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan. - Promesa de Salvación, de Seguridad, de la Fidelidad de Dios, de Protección, a la Oración, de la Presencia de Dios y de Bendición.
  • Is. 58:14 - Entonces te deleitarás en Jehová; y yo te haré subir sobre las alturas de la tierra, y te daré a comer la heredad de Jacob tu padre; porque la boca de Jehová lo ha hablado.
  • Is. 59:1-2 – He aquí que no se ha acortado la mano de Jehová para salvar, ni se ha agravado su oído para oír; pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios, y vuestros pecados han hecho ocultar de vosotros su rostro para no oír. - Promesa a la Oración.
  • Is. 59:19-21 – Y temerán desde el occidente el nombre de Jehová, y desde el nacimiento del sol su gloria; porque vendrá el enemigo como río, mas el Espíritu de Jehová levantará bandera contra él. Y vendrá el Redentor a Sion, y a los que se volvieren de la iniquidad en Jacob, dice Jehová. Y este será mi pacto con ellos, dijo Jehová: El Espíritu mío que está sobre ti, y mis palabras que puse en tu boca, no faltarán de tu boca, ni de la boca de tus hijos, ni de la boca de los hijos de tus hijos, dijo Jehová, desde ahora y para siempre. - Promesa de Defensa y de un Reino Mesianico.

  • Is. 60:1-3 – Levántate, resplandece; porque ha venido tu luz, y la gloria de Jehová ha nacido sobre ti. Porque he aquí que tinieblas cubrirán la tierra, y oscuridad las naciones; mas sobre ti amanecerá Jehová, y sobre ti será vista su gloria. Y andarán las naciones a tu luz, y los reyes al resplandor de tu nacimiento. - Promesa a las Misiones, de Protección y de un Reino Mesianico.
  • Is. 60:10 – Y extranjeros edificarán tus muros, y sus reyes te servirán; porque en mi ira te castigué, mas en mi buena voluntad tendré de ti misericordia. - Promesa de Gozo.

  • Is. 60:13-22 - La gloria del Líbano vendrá a ti, cipreses, pinos y bojes juntamente, para decorar el lugar de mi santuario; y yo honraré el lugar de mis pies. Y vendrán a ti humillados los hijos de los que te afligieron, y a las pisadas de tus pies se encorvarán todos los que te escarnecían, y te llamarán Ciudad de Jehová, Sion del Santo de Israel. En vez de estar abandonada y aborrecida, tanto que nadie pasaba por ti, haré que seas una gloria eterna, el gozo de todos los siglos. Y mamarás la leche de las naciones, el pecho de los reyes mamarás; y conocerás que yo Jehová soy el Salvador tuyo y Redentor tuyo, el Fuerte de Jacob. En vez de bronce traeré oro, y por hierro plata, y por madera bronce, y en lugar de piedras hierro; y pondré paz por tu tributo, y justicia por tus opresores. Nunca más se oirá en tu tierra violencia, destrucción ni quebrantamiento en tu territorio, sino que a tus muros llamarás Salvación, y a tus puertas Alabanza. El sol nunca más te servirá de luz para el día, ni el resplandor de la luna te alumbrará, sino que Jehová te será por luz perpetua, y el Dios tuyo por tu gloria. No se pondrá jamás tu sol, ni menguará tu luna; porque Jehová te será por luz perpetua, y los días de tu luto serán acabados. Y tu pueblo, todos ellos serán justos, para siempre heredarán la tierra; renuevos de mi plantío, obra de mis manos, para glorificarme. El pequeño vendrá a ser mil, el menor, un pueblo fuerte. Yo Jehová, a su tiempo haré que esto sea cumplido pronto.

  • Is. 61:1-3 – El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel; a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados; a ordenar que a los afligidos de Sion se les dé gloria en lugar de ceniza, óleo de gozo en lugar de luto, manto de alegría en lugar del espíritu angustiado; y serán llamados árboles de justicia, plantío de Jehová, para gloria suya. - Promesa para el Ganador de Almas, de Protección y de Consuelo.
  • Is. 61:8-11 - Porque yo Jehová soy amante del derecho, aborrecedor del latrocinio para holocausto; por tanto, afirmaré en verdad su obra, y haré con ellos pacto perpetuo. Y la descendencia de ellos será conocida entre las naciones, y sus renuevos en medio de los pueblos; todos los que los vieren, reconocerán que son linaje bendito de Jehová. En gran manera me gozaré en Jehová, mi alma se alegrará en mi Dios; porque me vistió con vestiduras de salvación, me rodeó de manto de justicia, como a novio me atavió, y como a novia adornada con sus joyas. Porque como la tierra produce su renuevo, y como el huerto hace brotar su semilla, así Jehová el Señor hará brotar justicia y alabanza delante de todas las naciones. - Promesa a las Misiones.

  • Is. 62:1-3 – Por amor de Sion no callaré, y por amor de Jerusalén no descansaré, hasta que salga como resplandor su justicia, y su salvación se encienda como una antorcha. Entonces verán las gentes tu justicia, y todos los reyes tu gloria; y te será puesto un nombre nuevo, que la boca de Jehová nombrará. Y serás corona de gloria en la mano de Jehová, y diadema de reino en la mano del Dios tuyo. - Promesa de la Gloria del Señor Jehová.
  • Is. 62:8-12 - Juró Jehová por su mano derecha, y por su poderoso brazo: Que jamás daré tu trigo por comida a tus enemigos, ni beberán los extraños el vino que es fruto de tu trabajo; sino que los que lo cosechan lo comerán, y alabarán a Jehová; y los que lo vendimian, lo beberán en los atrios de mi santuario. Pasad, pasad por las puertas; barred el camino al pueblo; allanad, allanad la calzada, quitad las piedras, alzad pendón a los pueblos. He aquí que Jehová hizo oír hasta lo último de la tierra: Decid a la hija de Sion: He aquí viene tu Salvador; he aquí su recompensa con él, y delante de él su obra. Y les llamarán Pueblo Santo, Redimidos de Jehová; y a ti te llamarán Ciudad Deseada, no desamparada.
  • Is. 63:9 – En toda angustia de ellos él fue angustiado, y el ángel de su faz los salvó; en su amor y en su clemencia los redimió, y los trajo, y los levantó todos los días de la antigüedad. - Promesa de Misericordia y de la Presencia de Dios.
  • Is. 64:4 – Ni nunca oyeron, ni oídos percibieron, ni ojo ha visto a Dios fuera de ti, que hiciese por el que en él espera.

  • Is. 65:1 – Fui buscado por los que no preguntaban por mí; fui hallado por los que no me buscaban. Dije a gente que no invocaba mi nombre: Heme aquí, heme aquí. - Promesa a las Misiones.
  • Is. 65:18-20 – Mas os gozaréis y os alegraréis para siempre en las cosas que yo he creado; porque he aquí que yo traigo a Jerusalén alegría, y a su pueblo gozo. Y me alegraré con Jerusalén, y me gozaré con mi pueblo; y nunca más se oirán en ella voz de lloro, ni voz de clamor. No habrá más allí niño que muera de pocos días, ni viejo que sus días no cumpla; porque el niño morirá de cien años, y el pecador de cien años será maldito. - Promesa de Consuelo y de un Reino Mesianico.
  • Is. 65:24 – Y antes que clamen, responderé yo; mientras aún hablan, yo habré oído.
  • Is. 66:2 – Mi mano hizo todas estas cosas, y así todas estas cosas fueron, dice Jehová; pero miraré a aquel que es pobre y humilde de espíritu, y que tiembla a mi palabra.
  • Is. 66:13 – Como aquel a quien consuela su madre, así os consolaré yo a vosotros, y en Jerusalén tomaréis consuelo. - Promesa de Consuelo, Protección.
  • Is. 66:18-19 – Porque yo conozco sus obras y sus pensamientos; tiempo vendrá para juntar a todas las naciones y lenguas; y vendrán, y verán mi gloria. Y pondré entre ellos señal, y enviaré de los escapados de ellos a las naciones, a Tarsis, a Fut y Lud que disparan arco, a Tubal y a Javán, a las costas lejanas que no oyeron de mí, ni vieron mi gloria; y publicarán mi gloria entre las naciones.
  • Promesas biblicas (Eclesiastés)

  • Ec. 2:26 – Porque al hombre que le agrada, Dios le da sabiduría, ciencia y gozo; mas al pecador da el trabajo de recoger y amontonar, para darlo al que agrada a Dios. También esto es vanidad y aflicción de espíritu.
  • Ec. 3:11 - Todo lo hizo hermoso en su tiempo; y ha puesto eternidad en el corazón de ellos, sin que alcance el hombre a entender la obra que ha hecho Dios desde el principio hasta el fin.
  • Ec. 3:13 – Y también que es don de Dios que todo hombre coma y beba, y goce el bien de toda su labor.
  • Ec. 4:9-12 – Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo. Porque si cayeren, el uno levantará a su compañero; pero ¡ay del solo! que cuando cayere, no habrá segundo que lo levante.  También si dos durmieren juntos, se calentarán mutuamente; mas ¿cómo se calentará uno solo? Y si alguno prevaleciere contra uno, dos le resistirán; y cordón de tres dobleces no se rompe pronto. - Promesa de Amistad.
  • Ec. 5:12 – Dulce es el sueño del trabajador, coma mucho, coma poco; pero al rico no le deja dormir la abundancia.
  • Ec. 7:1 - Mejor es la buena fama que el buen ungüento; y mejor el día de la muerte que el día del nacimiento.
  • Ec. 8:12 – Aunque el pecador haga mal cien veces, y prolongue sus días, con todo yo también sé que les irá bien a los que a Dios temen, los que temen ante su presencia. - Promesa de Bendición.
  • Ec. 9:9 - Goza de la vida con la mujer que amas, todos los días de la vida de tu vanidad que te son dados debajo del sol, todos los días de tu vanidad; porque esta es tu parte en la vida, y en tu trabajo con que te afanas debajo del sol
  • Ec. 11:1 – Echa tu pan sobre las aguas; porque después de muchos días lo hallarás.
  • Ec. 12:11 – Las palabras de los sabios son como aguijones; y como clavos hincados son las de los maestros de las congregaciones, dadas por un Pastor.
  • Promesas biblicas (Proverbios)

  • Pr. 1:5 – Oirá el sabio, y aumentará el saber, y el entendido adquirirá consejo.
  • Pr. 1:7 – El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza. - Promesa de Dirección.
  • Pr. 1:23 – Volveos a mi reprensión; he aquí yo derramaré mi espíritu sobre vosotros, y os haré saber mis palabras.
  • Pr. 1:33 – Mas el que me oyere, habitará confiadamente y vivirá tranquilo, sin temor del mal. - Promesa de Descanso y sobre el Espíritu Santo.
  • Pr. 2:6-7 – Porque Jehová da la sabiduría, y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia. El provee de sana sabiduría a los rectos; es escudo a los que caminan rectamente. - Promesa de Dirección.
  • Pr. 2:20 – Así andarás por el camino de los buenos, y seguirás las veredas de los justos.
  • Pr. 3:1-2 – Hijo mío, no te olvides de mi ley, y tu corazón guarde mis mandamientos; porque largura de días y años de vida y paz te aumentarán.
  • Pr. 3:4-19 – Y hallarás gracia y buena opinión ante los ojos de Dios y de los hombres. Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas. No seas sabio en tu propia opinión; teme a Jehová, y apártate del mal; porque será medicina a tu cuerpo, y refrigerio para tus huesos. Honra a Jehová con tus bienes, y con las primicias de todos tus frutos; y serán llenos tus graneros con abundancia, y tus lagares rebosarán de mosto. No menosprecies, hijo mío, el castigo de Jehová, ni te fatigues de su corrección; porque Jehová al que ama castiga, como el padre al hijo a quien quiere. Bienaventurado el hombre que halla la sabiduría, y que obtiene la inteligencia; porque su ganancia es mejor que la ganancia de la plata, y sus frutos más que el oro fino. Más preciosa es que las piedras preciosas; y todo lo que puedes desear, no se puede comparar a ella. Largura de días está en su mano derecha; en su izquierda, riquezas y honra. Sus caminos son caminos deleitosos, y todas sus veredas paz. Ella es árbol de vida a los que de ella echan mano, y bienaventurados son los que la retienen. Jehová con sabiduría fundó la tierra; afirmó los cielos con inteligencia. - Promesa de Dirección y de Disciplina.
  • Pr. 3:23-26 – Entonces andarás por tu camino confiadamente, y tu pie no tropezará. Cuando te acuestes, no tendrás temor, sino que te acostarás, y tu sueño será grato. No tendrás temor de pavor repentino, ni de la ruina de los impíos cuando viniere, porque Jehová será tu confianza, y él preservará tu pie de quedar preso. - Promesa de Ayuda y de Descanso.
  • Pr. 3:32-35 – Porque Jehová abomina al perverso; mas su comunión íntima es con los justos. La maldición de Jehová está en la casa del impío, pero bendecirá la morada de los justos. Ciertamente él escarnecerá a los escarnecedores, y a los humildes dará gracia. Los sabios heredarán honra, mas los necios llevarán ignominia. - Promesa de Bendición y de Ensalzamiento.
  • Pr. 4:18 – Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, que va en aumento hasta que el día es perfecto. - Promesa de Bendición.
  • Pr. 4:20-22 – Hijo mío, está atento a mis palabras; inclina tu oído a mis razones. No se aparten de tus ojos; guárdalas en medio de tu corazón; porque son vida a los que las hallan, y medicina a todo su cuerpo.
  • Pr. 5:18-19 – Sea bendito tu manantial, y alégrate con la mujer de tu juventud, como cierva amada y graciosa gacela. Sus caricias te satisfagan en todo tiempo, y en su amor recréate siempre.
  • Pr. 5:21 – Porque los caminos del hombre están ante los ojos de Jehová, y él considera todas sus veredas.
  • Pr. 6:22-23 – Te guiarán cuando andes; cuando duermas te guardarán; hablarán contigo cuando despiertes. Porque el mandamiento es lámpara, y la enseñanza es luz, y camino de vida las reprensiones que te instruyen.
  • Pr. 8:17 - Yo amo a los que me aman, y me hallan los que temprano me buscan.
  • Pr. 8:32-35 – Ahora, pues, hijos, oídme, y bienaventurados los que guardan mis caminos. Atended el consejo, y sed sabios, y no lo menospreciéis. Bienaventurado el hombre que me escucha, velando a mis puertas cada día, aguardando a los postes de mis puertas. Porque el que me halle, hallará la vida, y alcanzará el favor de Jehová. - Promesa de Bendición.
  • Pr. 9:9 - Da al sabio, y será más sabio; enseña al justo, y aumentará su saber.
  • Pr. 10:2-3 – Los tesoros de maldad no serán de provecho; mas la justicia libra de muerte. Jehová no dejará padecer hambre al justo; mas la iniquidad lanzará a los impíos.
  • Pr. 10:9 – El que camina en integridad anda confiado; mas el que pervierte sus caminos será quebrantado.
  • Pr. 10:12 – El odio despierta rencillas; pero el amor cubrirá todas las faltas.
  • Pr. 10:22 – La bendición de Jehová es la que enriquece, y no añade tristeza con ella. - Promesa de Bendición.
  • Pr. 10:24-25 – Lo que el impío teme, eso le vendrá; pero a los justos les será dado lo que desean. Como pasa el torbellino, así el malo no permanece; mas el justo permanece para siempre. - Promesa de Bendición.
  • Pr. 10:28-29 – La esperanza de los justos es alegría; mas la esperanza de los impíos perecerá. El camino de Jehová es fortaleza al perfecto; pero es destrucción a los que hacen maldad. - Promesa de Fortaleza.
  • Pr. 10:31-32 – La boca del justo producirá sabiduría; mas la lengua perversa será cortada. Los labios del justo saben hablar lo que agrada; mas la boca de los impíos habla perversidades.
  • Pr. 11:1 - El peso falso es abominación a Jehová; mas la pesa cabal le agrada.
  • Pr. 11:16 - La justicia de los rectos los librará; mas los pecadores serán atrapados en su pecado.
  • Pr. 11:18 – El impío hace obra falsa; mas el que siembra justicia tendrá galardón firme.
  • Pr. 11:20-21 – Abominación son a Jehová los perversos de corazón; mas los perfectos de camino le son agradables. Tarde o temprano, el malo será castigado; mas la descendencia de los justos será librada.
  • Pr. 11:24-25 – Hay quienes reparten, y les es añadido más; y hay quienes retienen más de lo que es justo, pero vienen a pobreza. El alma generosa será prosperada; y el que saciare, él también será saciado.
  • Pr. 11:28 – El que confía en sus riquezas caerá; mas los justos reverdecerán como ramas. - Promesa de Bendición.
  • Pr. 11:30 – El fruto del justo es árbol de vida; y el que gana almas es sabio. - Promesa para el Ganador de Almas.
  • Pr. 12:1 – El que ama la instrucción ama la sabiduría; mas el que aborrece la reprensión es ignorante.
  • Pr. 12:3-4 – El hombre no se afirmará por medio de la impiedad; mas la raíz de los justos no será removida. La mujer virtuosa es corona de su marido; mas la mala, como carcoma en sus huesos. - Promesa de Bendición.
  • Pr. 12:7 – Dios trastornará a los impíos, y no serán más; pero la casa de los justos permanecerá firme.
  • Pr. 12:15 – El camino del necio es derecho en su opinión; mas el que obedece al consejo es sabio.
  • Pr. 12:19-21 – El labio veraz permanecerá para siempre; mas la lengua mentirosa sólo por un momento. Engaño hay en el corazón de los que piensan el mal; pero alegría en el de los que piensan el bien. Ninguna adversidad acontecerá al justo; mas los impíos serán colmados de males.
  • Pr. 12:24 – La mano de los diligentes señoreará; mas la negligencia será tributaria. - Promesa de Bendición.
  • Pr. 12:28 – En el camino de la justicia está la vida; y en sus caminos no hay muerte.
  • Pr. 13:4-7 – El alma del perezoso desea, y nada alcanza; mas el alma de los diligentes será prosperada. El justo aborrece la palabra de mentira; mas el impío se hace odioso e infame. La justicia guarda al de perfecto camino; mas la impiedad trastornará al pecador. Hay quienes pretenden ser ricos, y no tienen nada; y hay quienes pretenden ser pobres, y tienen muchas riquezas.
  • Pr. 13:13 - El que menosprecia el precepto perecerá por ello; mas el que teme el mandamiento será recompensado.
  • Pr. 13:18-21 – Pobreza y vergüenza tendrá el que menosprecia el consejo; mas el que guarda la corrección recibirá honra. El deseo cumplido regocija el alma; pero apartarse del mal es abominación a los necios. El que anda con sabios, sabio será; mas el que se junta con necios será quebrantado. El mal perseguirá a los pecadores, mas los justos serán premiados con el bien.
  • Pr. 13:24 – El que detiene el castigo, a su hijo aborrece; mas el que lo ama, desde temprano lo corrige.
  • Pr. 14:1 – La mujer sabia edifica su casa; mas la necia con sus manos la derriba.
  • Pr. 14:4 – Sin bueyes el granero está vacío; mas por la fuerza del buey hay abundancia de pan.
  • Pr. 14:14 – De sus caminos será hastiado el necio de corazón; pero el hombre de bien estará contento del suyo. - Promesa de Bendición.
  • Pr. 14:23 – En toda labor hay fruto; mas las vanas palabras de los labios empobrecen.
  • Pr. 14:26-27 – En el temor de Jehová está la fuerte confianza; y esperanza tendrán sus hijos. El temor de Jehová es manantial de vida para apartarse de los lazos de la muerte. - Promesa de Confianza.
  • Pr. 14:32 - Por su maldad será lanzado el impío; mas el justo en su muerte tiene esperanza. - Promesa de Esperanza.
  • Pr. 14:34 - La justicia engrandece a la nación; mas el pecado es afrenta de las naciones. - Promesa de Bendición.
  • Pr. 15:1 – La blanda respuesta quita la ira; mas la palabra áspera hace subir el furor.
  • Pr. 15:4 – La lengua apacible es árbol de vida; mas la perversidad de ella es quebrantamiento de espíritu.
  • Pr. 15:13 – El corazón alegre hermosea el rostro; mas por el dolor del corazón el espíritu se abate.
  • Pr. 15:15-17 – Todos los días del afligido son difíciles; mas el de corazón contento tiene un banquete continuo. Mejor es lo poco con el temor de Jehová, que el gran tesoro donde hay turbación. Mejor es la comida de legumbres donde hay amor, que de buey engordado donde hay odio. - Promesa de Bendición.
  • Pr. 15:23 – El hombre se alegra con la respuesta de su boca; y la palabra a su tiempo, ¡cuán buena es!
  • Pr. 15:29 – Jehová está lejos de los impíos; pero él oye la oración de los justos.
  • Pr. 16:3 – Encomienda a Jehová tus obras, y tus pensamientos serán afirmados.
  • Pr. 16:7-9 – Cuando los caminos del hombre son agradables a Jehová, aun a sus enemigos hace estar en paz con él. Mejor es lo poco con justicia que la muchedumbre de frutos sin derecho. El corazón del hombre piensa su camino; mas Jehová endereza sus pasos. - Promesa de Defensa.
  • Pr. 16:20-24 – El entendido en la palabra hallará el bien, y el que confía en Jehová es bienaventurado. El sabio de corazón es llamado prudente, y la dulzura de labios aumenta el saber. Manantial de vida es el entendimiento al que lo posee; mas la erudición de los necios es necedad. El corazón del sabio hace prudente su boca, y añade gracia a sus labios. Panal de miel son los dichos suaves; suavidad al alma y medicina para los huesos. - Promesa de Bendición.
  • Pr. 16:31-32 – Corona de honra es la vejez que se halla en el camino de justicia. Mejor es el que tarda en airarse que el fuerte; y el que se enseñorea de su espíritu, que el que toma una ciudad. - Promesa a la Ancianidad.
  • Pr. 17:6 - Corona de los viejos son los nietos, y la honra de los hijos, sus padres.
  • Pr. 17:13 – El que da mal por bien, no se apartará el mal de su casa.
  • Pr. 17:17 – En todo tiempo ama el amigo, y es como un hermano en tiempo de angustia. - Promesa de Amistad.
  • Pr. 17:22 – El corazón alegre constituye buen remedio; mas el espíritu triste seca los huesos.
  • Pr. 18:10 – Torre fuerte es el nombre de Jehová; a él correrá el justo, y será levantado.
  • Pr. 18:22-24 - El que halla esposa halla el bien, y alcanza la benevolencia de Jehová. El pobre habla con ruegos, mas el rico responde durezas. El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo; y amigo hay más unido que un hermano.
  • Pr. 19:8 - El que posee entendimiento ama su alma; el que guarda la inteligencia hallará el bien.
  • Pr. 19:14 – La casa y las riquezas son herencia de los padres; mas de Jehová la mujer prudente.
  • Pr. 19:16-17 – El que guarda el mandamiento guarda su alma; mas el que menosprecia sus caminos morirá. A Jehová presta el que da al pobre, y el bien que ha hecho, se lo volverá a pagar.
  • Pr. 19:23 – El temor de Jehová es para vida, y con él vivirá lleno de reposo el hombre; no será visitado de mal. - Promesa de Descanso.
  • Pr. 20:3-4 – Honra es del hombre dejar la contienda; mas todo insensato se envolverá en ella. El perezoso no ara a causa del invierno; pedirá, pues, en la siega, y no hallará.
  • Pr. 20:7 – Camina en su integridad el justo; sus hijos son dichosos después de él.
  • Pr. 20:21-22 – Los bienes que se adquieren de prisa al principio, no serán al final bendecidos. No digas: Yo me vengaré; espera a Jehová, y él te salvará. - Promesa de Defensa.
  • Pr. 20:24 – De Jehová son los pasos del hombre; ¿Cómo, pues, entenderá el hombre su camino?
  • Pr. 20:28-30 – Misericordia y verdad guardan al rey, y con clemencia se sustenta su trono. La gloria de los jóvenes es su fuerza, y la hermosura de los ancianos es su vejez. Los azotes que hieren son medicina para el malo, y el castigo purifica el corazón. - Promesa a la Ancianidad y de Disciplina.
  • Pr. 21:5 – Los pensamientos del diligente ciertamente tienden a la abundancia; mas todo el que se apresura alocadamente, de cierto va a la pobreza.
  • Pr. 21:21 – El que sigue la justicia y la misericordia hallará la vida, la justicia y la honra.
  • Pr. 21:23 – El que guarda su boca y su lengua, su alma guarda de angustias.
  • Pr. 21:26 – Hay quien todo el día codicia; pero el justo da, y no detiene su mano.
  • Pr. 21:31 – El caballo se alista para el día de la batalla; mas Jehová es el que da la victoria. - Promesa de Defensa.
  • Pr. 22:1 – De más estima es el buen nombre que las muchas riquezas, y la buena fama más que la plata y el oro.
  • Pr. 22:4 – Riquezas, honra y vida son la remuneración de la humildad y del temor de Jehová. - Promesa de Bendición.
  • Pr. 22:6 – Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él.
  • Pr. 22:9 – El ojo misericordioso será bendito, porque dio de su pan al indigente.
  • Pr. 22:29 – ¿Has visto hombre solícito en su trabajo? Delante de los reyes estará; no estará delante de los de baja condición. - Promesa de Ensalzamiento.
  • Pr. 23:10-11 – No traspases el lindero antiguo, ni entres en la heredad de los huérfanos; porque el defensor de ellos es el Fuerte, el cual juzgará la causa de ellos contra ti. - Promesa de Defensa.
  • Pr. 23:13-14 - No rehúses corregir al muchacho; porque si lo castigas con vara, no morirá. Lo castigarás con vara, y librarás su alma del Seol.
  • Pr. 23:22 – Oye a tu padre, a aquel que te engendró; y cuando tu madre envejeciere, no la menosprecies.
  • Pr. 23:24 – Mucho se alegrará el padre del justo, y el que engendra sabio se gozará con él.
  • Pr. 24:3-4 – Con sabiduría se edificará la casa, y con prudencia se afirmará;Y con ciencia se llenarán las cámaras de todo bien preciado y agradable.
  • Pr. 25:21-22 – Si el que te aborrece tuviere hambre, dale de comer pan, y si tuviere sed, dale de beber agua; porque ascuas amontonarás sobre su cabeza, y Jehová te lo pagará.
  • Pr. 27:5-6 – Mejor es reprensión manifiesta que amor oculto. Fieles son las heridas del que ama; pero importunos los besos del que aborrece. - Promesa de Disciplina.
  • Pr. 27:9-10 – El ungüento y el perfume alegran el corazón, y el cordial consejo del amigo, al hombre. 10 No dejes a tu amigo, ni al amigo de tu padre; ni vayas a la casa de tu hermano en el día de tu aflicción. Mejor es el vecino cerca que el hermano lejos. - Promesa de Amistad.
  • Pr. 28:1 – Huye el impío sin que nadie lo persiga; mas el justo está confiado como un león. - Promesa de Confianza.
  • Pr. 28:5 – Los hombres malos no entienden el juicio; mas los que buscan a Jehová entienden todas las cosas.
  • Pr. 28:13-14 – El que encubre sus pecados no prosperará; mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia. Bienaventurado el hombre que siempre teme a Dios; mas el que endurece su corazón caerá en el mal.
  • Pr. 28:19-20 – El que labra su tierra se saciará de pan; mas el que sigue a los ociosos se llenará de pobreza. El hombre de verdad tendrá muchas bendiciones; mas el que se apresura a enriquecerse no será sin culpa. - Promesa de Bendición.
  • Pr. 28:23 – El que reprende al hombre, hallará después mayor gracia que el que lisonjea con la lengua.
  • Pr. 28:27 – El que da al pobre no tendrá pobreza; mas el que aparta sus ojos tendrá muchas maldiciones. - Promesa de Bendición.
  • Pr. 29:17-18 – Corrige a tu hijo, y te dará descanso, y dará alegría a tu alma. Sin profecía el pueblo se desenfrena; mas el que guarda la ley es bienaventurado.
  • Pr. 29:25 – El temor del hombre pondrá lazo; mas el que confía en Jehová será exaltado. - Promesa de Ensalzamiento.
  • Pr. 30:5-6 – Toda palabra de Dios es limpia; el es escudo a los que en él esperan. No añadas a sus palabras, para que no te reprenda, y seas hallado mentiroso.
  • Pr. 31:10-13 – Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas. El corazón de su marido está en ella confiado, y no carecerá de ganancias. Le da ella bien y no mal todos los días de su vida. Busca lana y lino, y con voluntad trabaja con sus manos.
  • Pr. 31:28-31 – Se levantan sus hijos y la llaman bienaventurada; y su marido también la alaba: Muchas mujeres hicieron el bien; mas tú sobrepasas a todas. Engañosa es la gracia, y vana la hermosura; la mujer que teme a Jehová, ésa será alabada. Dadle del fruto de sus manos, y alábenla en las puertas sus hechos.
  • Promesas biblicas (Salmos)

  • Sal. 1:1-3 – Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, ni estuvo en camino de pecadores, ni en silla de escarnecedores se ha sentado; sino que en la ley de Jehová está su delicia, y en su ley medita de día y de noche. Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, que da su fruto en su tiempo, y su hoja no cae; y todo lo que hace, prosperará.
  • Sal. 2:7-8 – Yo publicaré el decreto; Jehová me ha dicho: Mi hijo eres tú; Yo te engendré hoy. Pídeme, y te daré por herencia las naciones, y como posesión tuya los confines de la tierra.
  • Sal. 3:5 – Yo me acosté y dormí, y desperté, porque Jehová me sustentaba. - Promesa de Descanso.
  • Sal. 3:8 – La salvación es de Jehová; sobre tu pueblo sea tu bendición. Selah
  • Sal. 4:1 – Respóndeme cuando clamo, oh Dios de mi justicia. Cuando estaba en angustia, tú me hiciste ensanchar; ten misericordia de mí, y oye mi oración.
  • Sal. 4:3 – Sabed, pues, que Jehová ha escogido al piadoso para sí; Jehová oirá cuando yo a él clamare.
  • Sal. 4:7-8 – Tú diste alegría a mi corazón mayor que la de ellos cuando abundaba su grano y su mosto. En paz me acostaré, y asimismo dormiré; porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado. - Promesa de Descanso.
  • Sal. 5:8 – Guíame, Jehová, en tu justicia, a causa de mis enemigos; endereza delante de mí tu camino. - Promesa de Dirección.
  • Sal. 5:11-12 – Pero alégrense todos los que en ti confían; den voces de júbilo para siempre, porque tú los defiendes; en ti se regocijen los que aman tu nombre. Porque tú, oh Jehová, bendecirás al justo; como con un escudo lo rodearás de tu favor.
  • Sal. 6:8-10 – Apartaos de mí, todos los hacedores de iniquidad; porque Jehová ha oído la voz de mi lloro. Jehová ha oído mi ruego; ha recibido Jehová mi oración. Se avergonzarán y se turbarán mucho todos mis enemigos; se volverán y serán avergonzados de repente. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 7:10 – Mi escudo está en Dios, que salva a los rectos de corazón.
  • Sal. 9:9-10 - Jehová será refugio del pobre, refugio para el tiempo de angustia. En ti confiarán los que conocen tu nombre, por cuanto tú, oh Jehová, no desamparaste a los que te buscaron.
  • Sal. 9:12 – Porque el que demanda la sangre se acordó de ellos; no se olvidó del clamor de los afligidos.
  • Sal. 10:3 – Porque el malo se jacta del deseo de su alma, bendice al codicioso, y desprecia a Jehová.
  • Sal. 10:14 – Tú lo has visto; porque miras el trabajo y la vejación, para dar la recompensa con tu mano; a ti se acoge el desvalido; Tú eres el amparo del huérfano.
  • Sal. 11:1 – En Jehová he confiado; ¿Cómo decís a mi alma, que escape al monte cual ave? - Promesa de Confianza y de Defensa.
  • Sal. 11:4-7 – Jehová está en su santo templo; Jehová tiene en el cielo su trono; sus ojos ven, sus párpados examinan a los hijos de los hombres. Jehová prueba al justo; pero al malo y al que ama la violencia, su alma los aborrece. Sobre los malos hará llover calamidades; fuego, azufre y viento abrasador será la porción del cáliz de ellos. Porque Jehová es justo, y ama la justicia; el hombre recto mirará su rostro.
  • Sal. 12:7 – Tú, Jehová, los guardarás; de esta generación los preservarás para siempre. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 13:4-5 – Para que no diga mi enemigo: Lo vencí. Mis enemigos se alegrarían, si yo resbalara. Mas yo en tu misericordia he confiado; mi corazón se alegrará en tu salvación.
  • Sal. 14:7 – ¡Oh, que de Sion saliera la salvación de Israel! Cuando Jehová hiciere volver a los cautivos de su pueblo, se gozará Jacob, y se alegrará Israel.
  • Sal. 15:1-3 – Jehová, ¿quién habitará en tu tabernáculo? ¿Quién morará en tu monte santo? El que anda en integridad y hace justicia, y habla verdad en su corazón. El que no calumnia con su lengua, ni hace mal a su prójimo, ni admite reproche alguno contra su vecino.
  • Sal. 16:5-8 – Jehová es la porción de mi herencia y de mi copa; Tú sustentas mi suerte. Las cuerdas me cayeron en lugares deleitosos, y es hermosa la heredad que me ha tocado. Bendeciré a Jehová que me aconseja; aun en las noches me enseña mi conciencia. A Jehová he puesto siempre delante de mí; porque está a mi diestra, no seré conmovido. 9 Se alegró por tanto mi corazón, y se gozó mi alma; mi carne también reposará confiadamente. - Promesa de Ayuda y de Descanso.
  • Sal. 16:11 - Me mostrarás la senda de la vida; en tu presencia hay plenitud de gozo; delicias a tu diestra para siempre.
  • Sal. 17:8 – Guárdame como a la niña de tus ojos; escóndeme bajo la sombra de tus alas. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 17:13 – Levántate, oh Jehová; sal a su encuentro, póstrales; libra mi alma de los malos con tu espada. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 17:15 – En cuanto a mí, veré tu rostro en justicia; estaré satisfecho cuando despierte a tu semejanza.
  • Sal. 18:3 – Invocaré a Jehová, quien es digno de ser alabado, y seré salvo de mis enemigos.
  • Sal. 18:6 – En mi angustia invoqué a Jehová, y clamé a mi Dios. El oyó mi voz desde su templo, y mi clamor llegó delante de él, a sus oídos.
  • Sal. 18:16-19 – Envió desde lo alto; me tomó, me sacó de las muchas aguas. Me libró de mi poderoso enemigo, y de los que me aborrecían; pues eran más fuertes que yo. Me asaltaron en el día de mi quebranto, mas Jehová fue mi apoyo. Me sacó a lugar espacioso; me libró, porque se agradó de mí. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 18:25 – Con el misericordioso te mostrarás misericordioso, y recto para con el hombre íntegro.
  • Sal. 18:27 – Porque tú salvarás al pueblo afligido, y humillarás los ojos altivos. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 18:32-33 – Dios es el que me ciñe de poder, y quien hace perfecto mi camino; quien hace mis pies como de ciervas, y me hace estar firme sobre mis alturas. - Promesa de Fortaleza.
  • Sal. 18:35-36 - Me diste asimismo el escudo de tu salvación; tu diestra me sustentó, y tu benignidad me ha engrandecido. Ensanchaste mis pasos debajo de mí, y mis pies no han resbalado.
  • Sal. 18:39 – Pues me ceñiste de fuerzas para la pelea; has humillado a mis enemigos debajo de mí. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 18:43 - Me has librado de las contiendas del pueblo; me has hecho cabeza de las naciones; pueblo que yo no conocía me sirvió. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 18:47-48 – El Dios que venga mis agravios, y somete pueblos debajo de mí; el que me libra de mis enemigos, y aun me eleva sobre los que se levantan contra mí; me libraste de varón violento. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 19:7-11 – La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; el testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo. Los mandamientos de Jehová son rectos, que alegran el corazón; el precepto de Jehová es puro, que alumbra los ojos. El temor de Jehová es limpio, que permanece para siempre; los juicios de Jehová son verdad, todos justos. Deseables son más que el oro, y más que mucho oro afinado; y dulces más que miel, y que la que destila del panal. Tu siervo es además amonestado con ellos; en guardarlos hay grande galardón.
  • Sal. 20:1 – Jehová te oiga en el día de conflicto; el nombre del Dios de Jacob te defienda. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 20:6-8 – Ahora conozco que Jehová salva a su ungido; lo oirá desde sus santos cielos con la potencia salvadora de su diestra. Estos confían en carros, y aquéllos en caballos; mas nosotros del nombre de Jehová nuestro Dios tendremos memoria. Ellos flaquean y caen, mas nosotros nos levantamos, y estamos en pie. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 21:2 – Le has concedido el deseo de su corazón, y no le negaste la petición de sus labios. Selah.
  • Sal. 21:7 - Por cuanto el rey confía en Jehová, y en la misericordia del Altísimo, no será conmovido.
  • Sal. 22:4-5 – En ti esperaron nuestros padres; esperaron, y tú los libraste. Clamaron a ti, y fueron librados; confiaron en ti, y no fueron avergonzados.
  • Sal. 23:1-6 - Jehová es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma; me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre. Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; tu vara y tu cayado me infundirán aliento. Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando. Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, y en la casa de Jehová moraré por largos días. - Promesa de Aliento, de Descanso, de Dirección y de Consuelo.
  • Sal. 24:3-5 – ¿Quién subirá al monte de Jehová? ¿Y quién estará en su lugar santo
  • el limpio de manos y puro de corazón; el que no ha elevado su alma a cosas vanas, ni jurado con engaño. El recibirá bendición de Jehová, y justicia del Dios de salvación.
  • Sal. 25:3 – Ciertamente ninguno de cuantos esperan en ti será confundido; serán avergonzados los que se rebelan sin causa. - Promesa de Esperanza.
  • Sal. 25:5 - Encamíname en tu verdad, y enséñame, porque tú eres el Dios de mi salvación; en ti he esperado todo el día. - Promesa de Esperanza.
  • Sal. 25:8-15 – Bueno y recto es Jehová; por tanto, él enseñará a los pecadores el camino. Encaminará a los humildes por el juicio, y enseñará a los mansos su carrera. Todas las sendas de Jehová son misericordia y verdad, para los que guardan su pacto y sus testimonios. Por amor de tu nombre, oh Jehová, perdonarás también mi pecado, que es grande. ¿Quién es el hombre que teme a Jehová? El le enseñará el camino que ha de escoger. Gozará él de bienestar, y su descendencia heredará la tierra. La comunión íntima de Jehová es con los que le temen, y a ellos hará conocer su pacto. Mis ojos están siempre hacia Jehová, porque él sacará mis pies de la red. - Promesa de Dirección.
  • Sal. 27:1 - Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme? - Promesa de Defensa.
  • Sal. 27:3 – Aunque un ejército acampe contra mí, no temerá mi corazón; aunque contra mí se levante guerra, Yo estaré confiado. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 27:5 – Porque él me esconderá en su tabernáculo en el día del mal; me ocultará en lo reservado de su morada; sobre una roca me pondrá en alto.
  • Sal. 27:10 – Aunque mi padre y mi madre me dejaran, con todo, Jehová me recogerá. - Promesa de Consuelo.
  • Sal. 27:13-14 – Hubiera yo desmayado, si no creyese que veré la bondad de Jehová en la tierra de los vivientes. Aguarda a Jehová; esfuérzate, y aliéntese tu corazón; sí, espera a Jehová.
  • Sal. 28:6-8 - Bendito sea Jehová, que oyó la voz de mis ruegos. Jehová es mi fortaleza y mi escudo; en él confió mi corazón, y fui ayudado, por lo que se gozó mi corazón, y con mi cántico le alabaré. Jehová es la fortaleza de su pueblo, y el refugio salvador de su ungido.
  • Sal. 29:11 - Jehová dará poder a su pueblo; Jehová bendecirá a su pueblo con paz. - Promesa de Fortaleza.
  • Sal. 30:1-3 – Te glorificaré, oh Jehová, porque me has exaltado, y no permitiste que mis enemigos se alegraran de mí. Jehová Dios mío, a ti clamé, y me sanaste. Oh Jehová, hiciste subir mi alma del Seol; me diste vida, para que no descendiese a la sepultura. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 30:5 – Porque un momento será su ira, pero su favor dura toda la vida. Por la noche durará el lloro, y a la mañana vendrá la alegría. - Promesa de Consuelo.
  • Sal. 30:11 – Has cambiado mi lamento en baile; desataste mi cilicio, y me ceñiste de alegría. - Promesa de Consuelo.
  • Sal 31:7-8 – Me gozaré y alegraré en tu misericordia, porque has visto mi aflicción; has conocido mi alma en las angustias. No me entregaste en mano del enemigo; pusiste mis pies en lugar espacioso. - Promesa de Defensa.
  • Sal 31:19-20 – ¡Cuán grande es tu bondad, que has guardado para los que te temen, que has mostrado a los que esperan en ti, delante de los hijos de los hombres! En lo secreto de tu presencia los esconderás de la conspiración del hombre; los pondrás en un tabernáculo a cubierto de contención de lenguas.
  • Sal. 31:23 – Amad a Jehová, todos vosotros sus santos; a los fieles guarda Jehová, y paga abundantemente al que procede con soberbia.
  • Sal. 32:1-2 – Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada, y cubierto su pecado. Bienaventurado el hombre a quien Jehová no culpa de iniquidad, y en cuyo espíritu no hay engaño.
  • Sal. 32:5-8 – Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; y tú perdonaste la maldad de mi pecado. Por esto orará a ti todo santo en el tiempo en que puedas ser hallado; ciertamente en la inundación de muchas aguas no llegarán éstas a él. Tú eres mi refugio; me guardarás de la angustia; con cánticos de liberación me rodearás. Selah
    Te haré entender, y te enseñaré el camino en que debes andar; sobre ti fijaré mis ojos. - Promesa de Ayuda y de Dirección.
  • Sal. 33:4-5 – Porque recta es la palabra de Jehová, y toda su obra es hecha con fidelidad. 5 El ama justicia y juicio; de la misericordia de Jehová está llena la tierra. - Promesa de la Fidelidad de Dios.
  • Sal. 33:10-11 – Jehová hace nulo el consejo de las naciones, y frustra las maquinaciones de los pueblos. El consejo de Jehová permanecerá para siempre; los pensamientos de su corazón por todas las generaciones.
  • Sal. 33:18-21 – He aquí el ojo de Jehová sobre los que le temen, sobre los que esperan en su misericordia, para librar sus almas de la muerte, y para darles vida en tiempo de hambre. Nuestra alma espera a Jehová; nuestra ayuda y nuestro escudo es él. Por tanto, en él se alegrará nuestro corazón, porque en su santo nombre hemos confiado. - Promesa de Esperanza.
  • Sal. 34:4-7 - Busqué a Jehová, y él me oyó, y me libró de todos mis temores. Los que miraron a él fueron alumbrados, y sus rostros no fueron avergonzados. Este pobre clamó, y le oyó Jehová, y lo libró de todas sus angustias. El ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen, y los defiende. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 34:9-10 – Temed a Jehová, vosotros sus santos, pues nada falta a los que le temen. Los leoncillos necesitan, y tienen hambre; pero los que buscan a Jehová no tendrán falta de ningún bien.
  • Sal. 34:12-13 – ¿Quién es el hombre que desea vida, que desea muchos días para ver el bien? Guarda tu lengua del mal, y tus labios de hablar engaño.
  • Sal. 34:15 – Los ojos de Jehová están sobre los justos, y atentos sus oídos al clamor de ellos.
  • Sal. 34:17-19 – Claman los justos, y Jehová oye, y los libra de todas sus angustias. Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; y salva a los contritos de espíritu. Muchas son las aflicciones del justo, pero de todas ellas le librará Jehová. - Promesa de Consuelo.
  • Sal. 34:22 – Jehová redime el alma de sus siervos, y no serán condenados cuantos en él confían.
  • Sal. 35:27 – Canten y alégrense los que están a favor de mi justa causa, y digan siempre: Sea exaltado Jehová.
  • Sal. 36:7-9 – ¡Cuán preciosa, oh Dios, es tu misericordia! Por eso los hijos de los hombres se amparan bajo la sombra de tus alas. Serán completamente saciados de la grosura de tu casa, y tú los abrevarás del torrente de tus delicias. Porque contigo está el manantial de la vida; en tu luz veremos la luz.
  • Sal. 37:1-9 – No te impacientes a causa de los malignos, ni tengas envidia de los que hacen iniquidad. Porque como hierba serán pronto cortados, y como la hierba verde se secarán. Confía en Jehová, y haz el bien; y habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad. Deléitate asimismo en Jehová, y él te concederá las peticiones de tu corazón. Encomienda a Jehová tu camino, y confía en él; y él hará. Exhibirá tu justicia como la luz, y tu derecho como el mediodía. Guarda silencio ante Jehová, y espera en él. No te alteres con motivo del que prospera en su camino, por el hombre que hace maldades. Deja la ira, y desecha el enojo; no te excites en manera alguna a hacer lo malo. Porque los malignos serán destruidos, pero los que esperan en Jehová, ellos heredarán la tierra. - Promesa de Defensa, de la Fidelidad de Dios y de Descanso.
  • Sal. 37:11 – Pero los mansos heredarán la tierra, y se recrearán con abundancia de paz.
  • Sal. 37:14-19 – Los impíos desenvainan espada y entesan su arco, para derribar al pobre y al menesteroso, para matar a los de recto proceder. Su espada entrará en su mismo corazón, y su arco será quebrado. Mejor es lo poco del justo, que las riquezas de muchos pecadores. Porque los brazos de los impíos serán quebrados; mas el que sostiene a los justos es Jehová. Conoce Jehová los días de los perfectos, y la heredad de ellos será para siempre. No serán avergonzados en el mal tiempo, y en los días de hambre serán saciados. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 37:23-26 – Por Jehová son ordenados los pasos del hombre, y él aprueba su camino. Cuando el hombre cayere, no quedará postrado, porque Jehová sostiene su mano. Joven fui, y he envejecido, y no he visto justo desamparado, ni su descendencia que mendigue pan. En todo tiempo tiene misericordia, y presta; y su descendencia es para bendición. - Promesa de Dirección y de la Fidelidad de Dios.
  • Sal. 37:28 – Porque Jehová ama la rectitud, y no desampara a sus santos. Para siempre serán guardados; mas la descendencia de los impíos será destruida.
  • Sal. 37:30 – La boca del justo habla sabiduría, y su lengua habla justicia.
  • Sal. 37:32-34 – Acecha el impío al justo, y procura matarlo. Jehová no lo dejará en sus manos, ni lo condenará cuando le juzgaren. Espera en Jehová, y guarda su camino, y él te exaltará para heredar la tierra; cuando sean destruidos los pecadores, lo verás. - Promesa de Defensa y de Dirección.
  • Sal. 37:39-40 – Pero la salvación de los justos es de Jehová, y él es su fortaleza en el tiempo de la angustia. Jehová los ayudará y los librará; los libertará de los impíos, y los salvará, por cuanto en él esperaron. - Promesa de Defensa y de Fortaleza.
  • Sal. 38:15 – Porque en ti, oh Jehová, he esperado; tú responderás, Jehová Dios mío.
  • Sal. 40:1-3 – Pacientemente esperé a Jehová, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios. Verán esto muchos, y temerán, y confiarán en Jehová.
  • Sal. 40:5 – Has aumentado, oh Jehová Dios mío, tus maravillas; y tus pensamientos para con nosotros, no es posible contarlos ante ti. Si yo anunciare y hablare de ellos, no pueden ser enumerados.
  • Sal. 40:17 – Aunque afligido yo y necesitado, Jehová pensará en mí. Mi ayuda y mi libertador eres tú; Dios mío, no te tardes.
  • Sal. 41:1-3 - Bienaventurado el que piensa en el pobre; en el día malo lo librará Jehová. Jehová lo guardará, y le dará vida; será bienaventurado en la tierra, y no lo entregarás a la voluntad de sus enemigos. Jehová lo sustentará sobre el lecho del dolor; mullirás toda su cama en su enfermedad. - Promesa de Defensa.

    Libro II
  • Sal. 42:11 – ¿Por qué te abates, oh alma mía, y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios; porque aún he de alabarle, Salvación mía y Dios mío. - Promesa de Esperanza.
  • Sal. 44:3 – Envía tu luz y tu verdad; éstas me guiarán; me conducirán a tu santo monte, y a tus moradas. - Promesa de Guía y Ayuda.
  • Sal. 44:8 – En Dios nos gloriaremos todo el tiempo, y para siempre alabaremos tu nombre. Selah
  • Sal. 45:7 – Has amado la justicia y aborrecido la maldad; por tanto, te ungió Dios, el Dios tuyo, con óleo de alegría más que a tus compañeros.
  • Sal. 46:1-3 – Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. Por tanto, no temeremos, aunque la tierra sea removida, y se traspasen los montes al corazón del mar; aunque bramen y se turben sus aguas, y tiemblen los montes a causa de su braveza. Selah
  • Sal. 46:5 – Dios está en medio de ella; no será conmovida. Dios la ayudará al clarear la mañana. - Promesa de Ayuda.
  • Sal. 46:10 – Estad quietos, y conoced que yo soy Dios; seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra. - Promesa de Confianza.
  • Sal. 48:14 – Porque este Dios es Dios nuestro eternamente y para siempre; El nos guiará aun más allá de la muerte. - Promesa de Dirección.
  • Sal. 49:15 – Pero Dios redimirá mi vida del poder del Seol, porque él me tomará consigo. Selah
  • Sal. 50:15 – E invócame en el día de la angustia; te libraré, y tú me honrarás.
  • Sal. 50:23 – El que sacrifica alabanza me honrará; y al que ordenare su camino, le mostraré la salvación de Dios.
  • Sal. 51:14-15 - Líbrame de homicidios, oh Dios, Dios de mi salvación; cantará mi lengua tu justicia. Señor, abre mis labios, y publicará mi boca tu alabanza.
  • Sal. 51:17 – Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios.
  • Sal. 52:8-9 – Pero yo estoy como olivo verde en la casa de Dios; en la misericordia de Dios confío eternamente y para siempre. Te alabaré para siempre, porque lo has hecho así; y esperaré en tu nombre, porque es bueno, delante de tus
  • santos. - Promesa de Confianza y de Esperanza.
  • Sal. 54:4 – He aquí, Dios es el que me ayuda; el Señor está con los que sostienen mi vida.
  • Sal. 54:7 – Porque él me ha librado de toda angustia, y mis ojos han visto la ruina de mis enemigos. - Promesa de Consuelo.
  • Sal. 55:16-17 – En cuanto a mí, a Dios clamaré; y Jehová me salvará. Tarde y mañana y a mediodía oraré y clamaré, y él oirá mi voz.
  • Sal. 55:22 - Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; no dejará para siempre caído al justo. - Promesa de Descanso, Sustento y Confianza.
  • Sal. 56:3-4 – En el día que temo, yo en ti confío. En Dios alabaré su palabra; en Dios he confiado; no temeré; ¿Qué puede hacerme el hombre? - Promesa de Consuelo y de Defensa.
  • Sal. 56:9 – Serán luego vueltos atrás mis enemigos, el día en que yo clamare; esto sé, que Dios está por mí. - Promesa de Consuelo y de Defensa.
  • Sal. 57:1-3 – Ten misericordia de mí, oh Dios, ten misericordia de mí; porque en ti ha confiado mi alma, y en la sombra de tus alas me ampararé hasta que pasen los quebrantos. Clamaré al Dios Altísimo, al Dios que me favorece. El enviará desde los cielos, y me salvará de la infamia del que me acosa; Selah
    Dios enviará su misericordia y su verdad. - Promesa de Confianza y de Defensa.
  • Sal. 58:11 – Entonces dirá el hombre: Ciertamente hay galardón para el justo;
  • Sal. 60:11-12 – Danos socorro contra el enemigo, porque vana es la ayuda de los hombres. En Dios haremos proezas, y él hollará a nuestros enemigos.
  • Sal. 61:1-4 - Oye, oh Dios, mi clamor; a mi oración atiende. Desde el cabo de la tierra clamaré a ti, cuando mi corazón desmayare. Llévame a la roca que es más alta que yo, porque tú has sido mi refugio, y torre fuerte delante del enemigo. Yo habitaré en tu tabernáculo para siempre; estaré seguro bajo la cubierta de tus alas. Selah. - Promesa de Aliento.
  • Sal. 62:1-2 – En Dios solamente está acallada mi alma; de él viene mi salvación. El solamente es mi roca y mi salvación; es mi refugio, no resbalaré mucho. - Promesa de Descanso.
  • Sal. 62:5 – Alma mía, en Dios solamente reposa, porque de él es mi esperanza.
  • Sal. 62:11-12 – Una vez habló Dios; dos veces he oído esto: Que de Dios es el poder, y tuya, oh Señor, es la misericordia; porque tú pagas a cada uno conforme a su obra. - Promesa de Fortaleza.
  • Sal. 64:10 - Se alegrará el justo en Jehová, y confiará en él; y se gloriarán todos los rectos de corazón.
  • Sal. 65:2-3 - Tú oyes la oración; a ti vendrá toda carne. Las iniquidades prevalecen contra mí; mas nuestras rebeliones tú las perdonarás.
  • Sal. 65:5 – Con tremendas cosas nos responderás tú en justicia, oh Dios de nuestra salvación, esperanza de todos los términos de la tierra, y de los más remotos confines del mar.
  • Sal. 67:1-2 - Dios tenga misericordia de nosotros, y nos bendiga; haga resplandecer su rostro sobre nosotros; Selah
    Para que sea conocido en la tierra tu camino, en todas las naciones tu salvación.
  • Sal. 67:7 – Bendíganos Dios, y témanlo todos los términos de la tierra.
  • Sal. 68:3 – Mas los justos se alegrarán; se gozarán delante de Dios, y saltarán de alegría.
  • Sal. 68:5-6 – Padre de huérfanos y defensor de viudas es Dios en su santa morada. Dios hace habitar en familia a los desamparados; saca a los cautivos a prosperidad; mas los rebeldes habitan en tierra seca. - Promesa de Consuelo.
  • Sal. 68:9-11 – Abundante lluvia esparciste, oh Dios; a tu heredad exhausta tú la reanimaste. Los que son de tu grey han morado en ella; por tu bondad, oh Dios, has provisto al pobre. El Señor daba palabra; había grande multitud de las que llevaban buenas nuevas.
  • Sal. 68:20 – Dios, nuestro Dios ha de salvarnos, y de Jehová el Señor es el librar de la muerte.
  • Sal. 68:28 – Tu Dios ha ordenado tu fuerza; confirma, oh Dios, lo que has hecho para nosotros. - Promesa de Fortaleza.
  • Sal. 68:35 – Temible eres, oh Dios, desde tus santuarios; el Dios de Israel, él da fuerza y vigor a su pueblo. Bendito sea Dios. - Promesa de Fortaleza.
  • Sal. 69:1 – Sálvame, oh Dios, porque las aguas han entrado hasta el alma.
  • Sal. 69:32-33 – Lo verán los oprimidos, y se gozarán. Buscad a Dios, y vivirá vuestro corazón, porque Jehová oye a los menesterosos, y no menosprecia a sus prisioneros.
  • Sal. 71:5 – Porque tú, oh Señor Jehová, eres mi esperanza, seguridad mía desde mi juventud. - Promesa de Esperanza.
  • Sal. 71:17-18 – Oh Dios, me enseñaste desde mi juventud, y hasta ahora he manifestado tus maravillas. Aun en la vejez y las canas, oh Dios, no me desampares, hasta que anuncie tu poder a la posteridad, y tu potencia a todos los que han de venir. - Promesa a la Ancianidad.
  • Sal. 71:20-21 – Tú, que me has hecho ver muchas angustias y males, volverás a darme vida, y de nuevo me levantarás de los abismos de la tierra. Aumentarás mi grandeza, y volverás a consolarme. - Promesa de Consuelo.
  • Sal. 71:24 – Mi lengua hablará también de tu justicia todo el día; por cuanto han sido avergonzados, porque han sido confundidos los que mi mal procuraban. - Promesa de Consuelo.
  • Sal. 72:7-8 – Florecerá en sus días justicia, y muchedumbre de paz, hasta que no haya luna. Dominará de mar a mar, y desde el río hasta los confines de la tierra.
  • Sal. 72:12-14 – Porque él librará al menesteroso que clamare, y al afligido que no tuviere quien le socorra. Tendrá misericordia del pobre y del menesteroso, y salvará la vida de los pobres. De engaño y de violencia redimirá sus almas, y la sangre de ellos será preciosa ante sus ojos.
  • Sal. 72:16-17 - Será echado un puñado de grano en la tierra, en las cumbres de los montes; su fruto hará ruido como el Líbano, y los de la ciudad florecerán como la hierba de la tierra. Será su nombre para siempre, se perpetuará su nombre mientras dure el sol. Benditas serán en él todas las naciones; lo llamarán bienaventurado.
    Libro III
  • Sal. 73:1 – Ciertamente es bueno Dios para con Israel, para con los limpios de corazón.
  • Sal. 73:23-24 – Con todo, yo siempre estuve contigo; me tomaste de la mano derecha. Me has guiado según tu consejo, y después me recibirás en gloria. - Promesa de Dirección.
  • Sal. 75:6-7 – Porque ni de oriente ni de occidente, ni del desierto viene el enaltecimiento. Mas Dios es el juez; a éste humilla, y a aquél enaltece. - Promesa de Ensalzamiento.
  • Sal. 77:14 – Tú eres el Dios que hace maravillas; hiciste notorio en los pueblos tu poder.
  • Sal. 78:5-7 – El estableció testimonio en Jacob, y puso ley en Israel, la cual mandó a nuestros padres que la notificasen a sus hijos; para que lo sepa la generación venidera, y los hijos que nacerán; y los que se levantarán lo cuenten a sus hijos, a fin de que pongan en Dios su confianza, y no se olviden de las obras de Dios; que guarden sus mandamientos.
  • Sal. 81:10 - Yo soy Jehová tu Dios, que te hice subir de la tierra de Egipto; abre tu boca, y yo la llenaré.
  • Sal. 81:14 – En un momento habría yo derribado a sus enemigos, y vuelto mi mano contra sus adversarios.
  • Sal. 84:11-12 – Porque sol y escudo es Jehová Dios; gracia y gloria dará Jehová. No quitará el bien a los que andan en integridad. Jehová de los ejércitos, dichoso el hombre que en ti confía.
  • Sal. 85:8 – Escucharé lo que hablará Jehová Dios; porque hablará paz a su pueblo y a sus santos, para que no se vuelvan a la locura.
  • Sal. 85:10-13 - La misericordia y la verdad se encontraron; la justicia y la paz se besaron. La verdad brotará de la tierra, y la justicia mirará desde los cielos. Jehová dará también el bien, y nuestra tierra dará su fruto. La justicia irá delante de él, y sus pasos nos pondrá por camino.
  • Sal. 86:5 - Porque tú, Señor, eres bueno y perdonador, y grande en misericordia para con todos los que te invocan.
  • Sal. 86:7 – En el día de mi angustia te llamaré, porque tú me respondes.
  • Sal. 86:9 – Todas las naciones que hiciste vendrán y adorarán delante de ti, Señor, y glorificarán tu nombre.
  • Sal. 86:15 – Mas tú, Señor, Dios misericordioso y clemente, lento para la ira, y grande en misericordia y verdad. - Promesa de la Fidelidad de Dios.
  • Sal. 87:7 – Y cantores y tañedores en ella dirán: Todas mis fuentes están en ti.
  • Sal. 89:2 – Porque dije: Para siempre será edificada misericordia; en los cielos mismos afirmarás tu verdad.
  • Sal. 89:16 – En tu nombre se alegrará todo el día, y en tu justicia será enaltecido.
  • Sal. 89:18 – Porque Jehová es nuestro escudo, y nuestro rey es el Santo de Israel.
  • Sal. 89:21-23 – Mi mano estará siempre con él, mi brazo también lo fortalecerá. No lo sorprenderá el enemigo, ni hijo de iniquidad lo quebrantará; sino que quebrantaré delante de él a sus enemigos, y heriré a los que le aborrecen. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 89:26 – El me clamará: Mi padre eres tú, mi Dios, y la roca de mi salvación.
  • Sal. 89:31-34 – Si profanaren mis estatutos, y no guardaren mis mandamientos, entonces castigaré con vara su rebelión, y con azotes sus iniquidades. Mas no quitaré de él mi misericordia, ni falsearé mi verdad. No olvidaré mi pacto, ni mudaré lo que ha salido de mis labios. - Promesa de la Fidelidad de Dios.
  • Sal. 89:36 – Su descendencia será para siempre, y su trono como el sol delante de mí.
    Libro IV
  • Sal. 90:1-2 – Señor, tú nos has sido refugio de generación en generación. Antes que naciesen los montes y formases la tierra y el mundo, desde el siglo y hasta el siglo, tú eres Dios. - Promesa de Confianza y de la Fidelidad de Dios.
  • Sal. 91:1-7 - El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente. Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; mi Dios, en quien confiaré. El te librará del lazo del cazador, de la peste destructora. Con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas estarás seguro; escudo y adarga es su verdad. No temerás el terror nocturno, ni saeta que vuele de día, ni pestilencia que ande en oscuridad, ni mortandad que en medio del día destruya. Caerán a tu lado mil, y diez mil a tu diestra; mas a ti no llegará.
  • Sal. 91:10-11 – No te sobrevendrá mal, ni plaga tocará tu morada. Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos.
  • Sal. 91:14-16 – Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré; le pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombre. Me invocará, y yo le responderé; con él estaré yo en la angustia; lo libraré y le glorificaré. Lo saciaré de larga vida, y le mostraré mi salvación.
  • Sal. 92:12-15 - El justo florecerá como la palmera; crecerá como cedro en el Líbano. Plantados en la casa de Jehová, en los atrios de nuestro Dios florecerán. Aun en la vejez fructificarán; estarán vigorosos y verdes, para anunciar que Jehová mi fortaleza es recto, y que en él no hay injusticia. - Promesa a la Ancianidad.
  • Sal. 94:12-14 – Bienaventurado el hombre a quien tú, JAH, corriges, y en tu ley lo instruyes, para hacerle descansar en los días de aflicción, en tanto que para el impío se cava el hoyo. Porque no abandonará Jehová a su pueblo, ni desamparará su heredad. - Promesa de Disciplina.
  • Sal. 94:18-23 – Cuando yo decía: Mi pie resbala, tu misericordia, oh Jehová, me sustentaba. En la multitud de mis pensamientos dentro de mí, tus consolaciones alegraban mi alma. ¿Se juntará contigo el trono de iniquidades que hace agravio bajo forma de ley? Se juntan contra la vida del justo, y condenan la sangre inocente. Mas Jehová me ha sido por refugio, y mi Dios por roca de mi confianza. Y él hará volver sobre ellos su iniquidad, y los destruirá en su propia maldad; los destruirá Jehová nuestro Dios. - Promesa de Ayuda.
  • Sal. 95:6-7 – Venid, adoremos y postrémonos; arrodillémonos delante de Jehová nuestro Hacedor. Porque él es nuestro Dios; nosotros el pueblo de su prado, y ovejas de su mano. Si oyereis hoy su voz. - Promesa de Congregación.
  • Sal. 97:10-11 – Los que amáis a Jehová, aborreced el mal; el guarda las almas de sus santos; de mano de los impíos los libra. Luz está sembrada para el justo, y alegría para los rectos de corazón.
  • Sal. 100:3 – Reconoced que Jehová es Dios; El nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos; Pueblo suyo somos, y ovejas de su prado.
  • Sal. 100:5 – Porque Jehová es bueno; para siempre es su misericordia, y su verdad por todas las generaciones.
  • Sal. 101:6 – Mis ojos pondré en los fieles de la tierra, para que estén conmigo; el que ande en el camino de la perfección, éste me servirá.
  • Sal. 102:17 – Habrá considerado la oración de los desvalidos, y no habrá desechado el ruego de ellos.
  • Sal. 103:1-6 – Bendice, alma mía, a Jehová, y bendiga todo mi ser su santo nombre. Bendice, alma mía, a Jehová, y no olvides ninguno de sus beneficios. El es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias; El que rescata del hoyo tu vida, El que te corona de favores y misericordias; El que sacia de bien tu boca de modo que te rejuvenezcas como el águila. Jehová es el que hace justicia y derecho a todos los que padecen violencia.
  • Sal. 103:8 – Misericordioso y clemente es Jehová; lento para la ira, y grande en misericordia.
  • Sal. 103:10 – No ha hecho con nosotros conforme a nuestras iniquidades, ni nos ha pagado conforme a nuestros pecados.
  • Sal. 103:12-14 – Cuanto está lejos el oriente del occidente, hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones. Como el padre se compadece de los hijos, se compadece Jehová de los que le temen. Porque él conoce nuestra condición; se acuerda de que somos polvo. - Promesa de Consuelo.
  • Sal. 103:17-18 – Mas la misericordia de Jehová es desde la eternidad y hasta la eternidad sobre los que le temen, y su justicia sobre los hijos de los hijos; sobre los que guardan su pacto, y los que se acuerdan de sus mandamientos para ponerlos por obra.
  • Sal. 105:3 – Gloriaos en su santo nombre; alégrese el corazón de los que buscan a Jehová.
  • Sal. 105:14-15 – No consintió que nadie los agraviase, y por causa de ellos castigó a los reyes. No toquéis, dijo, a mis ungidos, ni hagáis mal a mis profetas.
  • Sal. 105:37 – Los sacó con plata y oro; y no hubo en sus tribus enfermo.
  • Sal. 105:39-41 – Extendió una nube por cubierta, y fuego para alumbrar la noche. Pidieron, e hizo venir codornices; y los sació de pan del cielo. Abrió la peña, y fluyeron aguas; corrieron por los sequedales como un río.
  • Sal. 106:3 – Dichosos los que guardan juicio, los que hacen justicia en todo tiempo.
  • Sal. 106:10 – Los salvó de mano del enemigo, y los rescató de mano del adversario.
    Libro V
  • Sal. 107:1 – 1 Alabad a Jehová, porque él es bueno; porque para siempre es su misericordia.
  • Sal. 107:9 – Porque sacia al alma menesterosa, y llena de bien al alma hambrienta.
  • Sal. 107:29-30 – Cambia la tempestad en sosiego, y se apaciguan sus ondas. Luego se alegran, porque se apaciguaron; y así los guía al puerto que deseaban.
  • Sal. 109:-26-31 – Ayúdame, Jehová Dios mío; sálvame conforme a tu misericordia. Y entiendan que esta es tu mano; que tú, Jehová, has hecho esto. Maldigan ellos, pero bendice tú; levántense, mas sean avergonzados, y regocíjese tu siervo. Sean vestidos de ignominia los que me calumnian; sean cubiertos de confusión como con manto. Yo alabaré a Jehová en gran manera con mi boca, y en medio de muchos le alabaré. Porque él se pondrá a la diestra del pobre, para librar su alma de los que le juzgan. - Promesa de Consuelo.
  • Sal. 110:-5-6 – El Señor está a tu diestra; quebrantará a los reyes en el día de su ira. Juzgará entre las naciones, las llenará de cadáveres; quebrantará las cabezas en muchas tierras.
  • Sal. 111:-5 – Ha dado alimento a los que le temen; para siempre se acordará de su pacto.
  • Sal. 112:4 – Resplandeció en las tinieblas luz a los rectos; es clemente, misericordioso y justo.
  • Sal. 112:7 – No tendrá temor de malas noticias; su corazón está firme, confiado en Jehová.
  • Sal. 113:7-9 – El levanta del polvo al pobre, y al menesteroso alza del muladar, para hacerlos sentar con los príncipes, con los príncipes de su pueblo. El hace habitar en familia a la estéril, que se goza en ser madre de hijos. Aleluya. - Promesa de Ensalzamiento.
  • Sal. 115:12-14 – Jehová se acordó de nosotros; nos bendecirá; bendecirá a la casa de Israel; bendecirá a la casa de Aarón. Bendecirá a los que temen a Jehová, a pequeños y a grandes. Aumentará Jehová bendición sobre vosotros; sobre vosotros y sobre vuestros hijos.
  • Sal. 116:1 – Amo a Jehová, pues ha oído mi voz y mis súplicas; porque ha inclinado a mí su oído.
  • Sal. 116:6-7 – Jehová guarda a los sencillos; estaba yo postrado, y me salvó. Vuelve, oh alma mía, a tu reposo, porque Jehová te ha hecho bien. - Promesa de Descanso.
  • Sal. 116:15 – Estimada es a los ojos de Jehová la muerte de sus santos.
  • Sal. 117:2 – Porque ha engrandecido sobre nosotros su misericordia, y la fidelidadde Jehová es para siempre. Aleluya. - Promesa de la Fidelidad de Dios.
  • Sal. 118:5-9 – Desde la angustia invoqué a JAH, y me respondió JAH, poniéndome en lugar espacioso. Jehová está conmigo; no temeré lo que me pueda hacer el hombre. Jehová está conmigo entre los que me ayudan; por tanto, yo veré mi deseo en los que me aborrecen. Mejor es confiar en Jehová que confiar en el hombre. Mejor es confiar en Jehová que confiar en príncipes. - Promesa de Consuelo.
  • Sal. 118:11 – Me rodearon y me asediaron; mas en el nombre de Jehová yo las destruiré.
  • Sal. 119:1-2 – Bienaventurados los perfectos de camino, los que andan en la ley de Jehová. Bienaventurados los que guardan sus testimonios, y con todo el corazón le buscan.
  • Sal. 119:9 – ¿Con qué limpiará el joven su camino? Con guardar tu palabra.
  • Sal. 119:24 – Pues tus testimonios son mis delicias y mis consejeros. Dálet
  • Sal. 119:28 – Se deshace mi alma de ansiedad; susténtame según tu palabra.
  • Sal. 119:30-32 – Escogí el camino de la verdad; he puesto tus juicios delante de mí. Me he apegado a tus testimonios; oh Jehová, no me avergüences. Por el camino de tus mandamientos correré, cuando ensanches mi corazón. He
  • Sal. 119:49-50 – Acuérdate de la palabra dada a tu siervo, en la cual me has hecho esperar. Ella es mi consuelo en mi aflicción, porque tu dicho me ha vivificado.
  • Sal. 119:52 – Me acordé, oh Jehová, de tus juicios antiguos, y me consolé. - Promesa de Consuelo.
  • Sal. 119:67 – Antes que fuera yo humillado, descarriado andaba; mas ahora guardo tu palabra. - Promesa de Disciplina.
  • Sal. 119:71 – Bueno me es haber sido humillado, para que aprenda tus estatutos. - Promesa de Disciplina.
  • Sal. 119:75-76 – Conozco, oh Jehová, que tus juicios son justos, y que conforme a tu fidelidad me afligiste. 76 Sea ahora tu misericordia para consolarme, conforme a lo que has dicho a tu siervo. - Promesa de la Fidelidad de Dios.
  • Sal. 119:92-93 – Si tu ley no hubiese sido mi delicia, ya en mi aflicción hubiera perecido. Nunca jamás me olvidaré de tus mandamientos, porque con ellos me has vivificado. - Promesa de Consuelo.
  • Sal. 119:105 – Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino.
  • Sal. 119:130 – La exposición de tus palabras alumbra; hace entender a los simples.
  • Sal. 119:165 – Mucha paz tienen los que aman tu ley, y no hay para ellos tropiezo.
  • Sal. 120:1 – A Jehová clamé estando en angustia, y él me respondió.
  • Sal. 121:1-8 - Alzaré mis ojos a los montes; ¿De dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene de Jehová, que hizo los cielos y la tierra. No dará tu pie al resbaladero, ni se dormirá el que te guarda. He aquí, no se adormecerá ni dormirá el que guarda a Israel. Jehová es tu guardador; Jehová es tu sombra a tu mano derecha. El sol no te fatigará de día, ni la luna de noche. Jehová te guardará de todo mal; el guardará tu alma. Jehová guardará tu salida y tu entrada desde ahora y para siempre. - Promesa de Ayuda y de Fortaleza.
  • Sal. 124:1 – A no haber estado Jehová por nosotros, diga ahora Israel.
  • Sal. 124:1 – A no haber estado Jehová por nosotros, diga ahora Israel.
  • Sal. 124:3 – Vivos nos habrían tragado entonces, cuando se encendió su furor contra nosotros.
  • Sal. 124:6 - Bendito sea Jehová, que no nos dio por presa a los dientes de ellos.
  • Sal. 124:8 - Nuestro socorro está en el nombre de Jehová, que hizo el cielo y la tierra. - Promesa de Consuelo.
  • Sal. 125:2 – Como Jerusalén tiene montes alrededor de ella, así Jehová está alrededor de su pueblo desde ahora y para siempre.
  • Sal. 126:2-3 – Entonces nuestra boca se llenará de risa, y nuestra lengua de alabanza; entonces dirán entre las naciones: grandes cosas ha hecho Jehová con éstos. Grandes cosas ha hecho Jehová con nosotros; estaremos alegres.
  • Sal. 126:5-6 – Los que sembraron con lágrimas, con regocijo segarán. Irá andando y llorando el que lleva la preciosa semilla; mas volverá a venir con regocijo, trayendo sus gavillas.
  • Sal. 127:1-2 – Si Jehová no edificare la casa, en vano trabajan los que la edifican; si Jehová no guardare la ciudad, en vano vela la guardia. Por demás es que os levantéis de madrugada, y vayáis tarde a reposar, y que comáis pan de dolores; pues que a su amado dará Dios el sueño. - Promesa de Descanso.
  • Sal. 127:5 – Bienaventurado el hombre que llenó su aljaba de ellos; no será avergonzado cuando hablare con los enemigos en la puerta.
  • Sal. 128:1-6 – Bienaventurado todo aquel que teme a Jehová, que anda en sus caminos. Cuando comieres el trabajo de tus manos, bienaventurado serás, y te irá bien. Tu mujer será como vid que lleva fruto a los lados de tu casa; tus hijos como plantas de olivo alrededor de tu mesa. He aquí que así será bendecido el hombre que teme a Jehová. Bendígate Jehová desde Sion, y veas el bien de Jerusalén todos los días de tu vida, y veas a los hijos de tus hijos. Paz sea sobre Israel. - Promesa a la Ancianidad.
  • Sal. 130:3-4 – JAH, si mirares a los pecados, ¿Quién, oh Señor, podrá mantenerse? Pero en ti hay perdón, para que seas reverenciado.
  • Sal. 132:13-16 – Porque Jehová ha elegido a Sion; la quiso por habitación para sí. Este es para siempre el lugar de mi reposo; aquí habitaré, porque la he querido. Bendeciré abundantemente su provisión; a sus pobres saciaré de pan. Asimismo vestiré de salvación a sus sacerdotes, y sus santos darán voces de júbilo.
  • Sal. 133:1-3 – ¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es habitar los hermanos juntos en armonía! es como el buen óleo sobre la cabeza, el cual desciende sobre la barba, la barba de Aarón, y baja hasta el borde de sus vestiduras; como el rocío de Hermón, que desciende sobre los montes de Sion; porque allí envía Jehová bendición, y vida eterna. - Promesa de Congregación.
  • Sal. 138:3 – El día que clamé, me respondiste; me fortaleciste con vigor en mi alma. - Promesa de Fortaleza.
  • Sal. 138:6-8 – Porque Jehová es excelso, y atiende al humilde, mas al altivo mira de lejos. Si anduviere yo en medio de la angustia, tú me vivificarás; contra la ira de mis enemigos extenderás tu mano, y me salvará tu diestra. Jehová cumplirá su propósito en mí; tu misericordia, oh Jehová, es para siempre; no desampares la obra de tus manos. - Promesa de Ayuda, de Consuelo y de la Fidelidad de Dios.
  • Sal. 139:4 - Pues aún no está la palabra en mi lengua, y he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda.
  • Sal. 139:7-12 – ¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a dónde huiré de tu presencia? Si subiere a los cielos, allí estás tú; y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás. Si tomare las alas del alba y habitare en el extremo del mar, aun allí me guiará tu mano, y me asirá tu diestra. Si dijere: Ciertamente las tinieblas me encubrirán; aun la noche resplandecerá alrededor de mí. Aun las tinieblas no encubren de ti, y la noche resplandece como el día; lo mismo te son las tinieblas que la luz.
  • Sal. 140:12-13 – Yo sé que Jehová tomará a su cargo la causa del afligido, y el derecho de los necesitados. Ciertamente los justos alabarán tu nombre; los rectos morarán en tu presencia. - Promesa de Defensa.
  • Sal. 142:7 – Saca mi alma de la cárcel, para que alabe tu nombre; me rodearán los justos, porque tú me serás propicio.
  • Sal. 143:10-12 – Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios; tu buen espíritu me guíe a tierra de rectitud. Por tu nombre, oh Jehová, me vivificarás; por tu justicia sacarás mi alma de angustia. Y por tu misericordia disiparás a mis enemigos, y destruirás a todos los adversarios de mi alma, porque yo soy tu siervo. - Promesa de Dirección.
  • Sal. 145:8-10 – Clemente y misericordioso es Jehová, lento para la ira, y grande en misericordia. Bueno es Jehová para con todos, y sus misericordias sobre todas sus obras. Te alaben, oh Jehová, todas tus obras, y tus santos te bendigan.
  • Sal. 145:14-20 – Sostiene Jehová a todos los que caen, y levanta a todos los oprimidos. Los ojos de todos esperan en ti, y tú les das su comida a su tiempo. Abres tu mano, y colmas de bendición a todo ser viviente. Justo es Jehová en todos sus caminos, y misericordioso en todas sus obras. Cercano está Jehová a todos los que le invocan, a todos los que le invocan de veras. Cumplirá el deseo de los que le temen; oirá asimismo el clamor de ellos, y los salvará. Jehová guarda a todos los que le aman, mas destruirá a todos los impíos. - Promesa de la Fidelidad de Dios.
  • Sal. 146:5-9 – Bienaventurado aquel cuyo ayudador es el Dios de Jacob, cuya esperanza está en Jehová su Dios, el cual hizo los cielos y la tierra, el mar, y todo lo que en ellos hay; que guarda verdad para siempre, que hace justicia a los agraviados, que da pan a los hambrientos. Jehová liberta a los cautivos; Jehová abre los ojos a los ciegos; Jehová levanta a los caídos; Jehová ama a los justos. Jehová guarda a los extranjeros; al huérfano y a la viuda sostiene, y el camino de los impíos trastorna. - Promesa del Amor de Dios y de Confianza y de la Fidelidad de Dios.
  • Sal. 147:3 – El sana a los quebrantados de corazón, y venda sus heridas. - Promesa de Consuelo y de Salud.
  • Sal. 147:6 – Jehová exalta a los humildes, y humilla a los impíos hasta la tierra. - Promesa de Ensalzamiento.
  • Sal. 147:10-11 – No se deleita en la fuerza del caballo, ni se complace en la agilidad del hombre. Se complace Jehová en los que le temen, y en los que esperan en su misericordia.
  • Sal. 149:4 - Porque Jehová tiene contentamiento en su pueblo; hermoseará a los humildes con la salvación.